Frente a los grandes retos mundiales, las instituciones de educación superior necesitan estar a la vanguardia a través de programas educativos de calidad. Ésta puede ser validada por un organismo externo, como unos ojos que a veces alcanzan a percibir lo que los programas educativos, frente a la dinámica del día a día, no alcanzan a ver.

Los programas académicos están obligados a centrar su atención en una instrucción de calidad que provoque una formación educativa a través de conocimientos. Esto debe formar estudiantes que sean ciudadanos críticos, con competencias y habilidades que contribuyan al bien común y un mejor futuro colectivo. En este sentido, hablar de calidad se convierte en la guía para brincar cualquier tipo de desafíos que pueda enfrentar el sector educativo. 

El estar en la búsqueda constante de la mejora continua, estima el plantearse el asegurar la calidad a través del aprendizaje de los estudiantes, por lo que la acreditación de los programas educativos se convierte en un “deber ser”, siempre ligado a la filosofía y/o razón de ser de cada institución educativa, a los objetivos que tenga establecidos, pensando en las insuficiencias sociales y en los retos que el fenómeno de la globalización exija como una forma de competir no solo a nivel nacional sino a nivel internacional. 

Las instituciones educativas que velan por la calidad de la formación de los estudiantes de licenciaturas, especialidades, maestrías y doctorados, siempre están dispuestas a evitar una crisis de calidad y provocar que los planes de estudio sean los adecuados y que haya gestiones eficaces, eficientes, donde el resultado se convierte en el eje central y la calidad como el motor de los resultados.

 La acreditación evalúa desde el propósito del programa, las condiciones generales de operación, el modelo educativo y el plan de estudios, las actividades para la formación integral, los procesos de ingreso, la trayectoria escolar, egreso, resultados de los estudiantes, resultados del programa, personal académico, infraestructura académica y servicios de apoyo, es un examen que posibilita tener una radiografía del programa académico donde se valida que cumplan con los requisitos, y se hagan buenas prácticas alineadas a las necesidades del entorno laboral.