Espero que se encuentren teniendo una gran semana. He estado hablando mucho la semana pasada con una persona que me escribió a mi página de Facebook, después de desahogarse de todo lo que tenía encima, le di unos cuantos consejos para ir mejorando sus días. Las cosas han ido mejoraron poco a poco para él (no me permitió publicar su nombre), sin embargo me di cuenta de que le hacia falta algo muy importante que no le permitía mejorar. Esto era el dormir.

Actualmente vivimos dos mundos, el físico y el virtual, en ambos invertimos mucho tiempo de nuestro día. Si además agregamos la carga de trabajo de la oficina o escuela tenemos como consecuencia que el tiempo se nos va rápido, lo que genera como otro resultado que no dormimos lo suficiente para estar bien (lo cual perjudica mucho nuestro rendimiento del día siguiente).

Las consecuencias a las que nos enfrentamos al dormir muy poco (menos de 6 horas) son muchas como por ejemplo, las presión arterial puede encontrarse por arriba de lo normal, nuestra concentración en las actividades que realizamos disminuye, el estado de ánimo cambia mucho, se tiende a cometer más errores, nos volvemos propensos a enfermarnos, falla la memoria, entre muchas otras.

Ahora bien, para ver el contraste, los beneficios que tenemos al dormir bien son, por ejemplos, ayuda a perder peso (no mucho, no se emocionen), mejora la memoria, disminuye la tendencia a tener depresión, nuestros daños en el tejido físico se reparan con mayor rapidez, tenemos menos arrugas en la cara (ojo chicas), y si le agregamos un deporte, el tejido muscular incrementa más (volviéndose fuerte).

Algo que una vez me dijo mi mamá es que el sueño nunca se recupera. Esto quiere decir que si hoy duermo 3 horas y mañana 10 horas, el cuerpo no va a compensar el daño hecho. No debemos olvidar que TODO, en exceso llega a ser malo (gracias papá por esta advertencia).

Yo duermo 6 horas aproximadamente, así que hoy voy a proponer algo retador, el cual es que sin importar lo que pase, siempre hay que irse a dormir a las 10:00 de la noche y dormir por mínimo 6 horas y como máximo 8.

Deben saber que esto de dormir bien ayudó muchísimo al chico que escribió a mi página y como consecuencia, en vez de tener más días malos, ha empezado a tener más ¡días mejores! Así que no perdemos nada con intentarlo, hay que hacerlo por salud física y mental.

Si bien quieren desahogarse de cualquier cosa, ya saben que pueden escribirme a mi página de Facebook Roberto Cuautle. Espero que tengan un gran día y que disfruten lo que queda de la semana ¡hasta la próxima semana!