La creación del nanosatélite AzTechSat-1 le ha dado a todos los estudiantes involucrados, la oportunidad de crecer no solo en el plano académico, sino también en el plano profesional; tal es el caso de Oliver Said Castaños Rivera, estudiante de Ingeniería en Diseño Automotriz, quien buscó salir de su zona de confort al involucrarse en un proyecto que involucra otras áreas de la ingeniería.

Cuando estaba cursando su séptimo semestre, el estudiante se unió al área del AzTechSat llamada “Mision Space” en la cual se enfrentó con el reto de integrar sus conocimientos de diseño automotriz al diseño del nano satélite, para que este se pudiera comunicar con otras estaciones en la Tierra, por lo que tuvo que estudiar más allá de lo que veía en sus clases, al mismo tiempo que realizaba pruebas.

Parte critica del proyecto, para Oliver, fue la comunicación de las distintas áreas del equipo ya que existieron retos que dependían del trabajo de dos o más áreas:

“Al principio todos estábamos muy centrados en nuestra propia área, pero para ciertos problemas o partes que tuvimos que comunicarnos con los demás y aprender la forma de relacionarse con áreas, no totalmente ajenas, pero con las cuales no tienes esa convivencia normal día a día. Eso fue parte de un desarrollo más humano, por decirlo así” aseguró.

Asimismo, el estudiante también tuvo que aprender a utilizar un nuevo programa que no se ve en su carrera, por lo que incluso tuvo que ser autodidacta, ya que sus profesores estaban ocupados con sus propios retos dentro del proyecto. Fue así como pasó de dedicarle dos días semanales a estar casi al 100% de lleno durante los últimos 12 meses, pues ya se acercaba la fecha del lanzamiento.

Por otro lado, Oliver comentó que también tuvo la oportunidad de conocer al personal de la NASA durante la primera revisión del nanosatélite, motivo por el cual todos en su área estaban muy nerviosos.

Al hacer una retrospectiva a su pasado, jamás se hubiera imaginado estar en un proyecto del ámbito aeroespacial, por el hecho de que su carrera es totalmente distinta a las que se veían involucradas en este gran proyecto; a pesar de esto, Oliver tenía una motivación muy importante, que era la de adquirir más conocimiento y conocer nuevas personas, lo que le dejó buenos amigos dentro del proyecto y nuevas capacidades.

Después de dos años en el proyecto del AzTechSat, Oliver está por finalizar sus estudios, motivo por el que está viendo los tramites de titulación, al mismo tiempo que cursa un diplomado, por lo que sí va a continuar con el nanosatélite, pero solo como apoyo; sin embargo, asegura que de esta experiencia se lleva muchos conocimientos que nunca pensó adquirir e invita a alumnos de otras ingenierías o carreras a involucrarse en proyectos universitarios , aunque no sean de su área ya que nunca se sabe qué habilidades ocultas tiene cada persona.