No sé si será una característica de los tiempos actuales o siempre han existido, pero de un tiempo para acá, me he dado cuenta de que se estrenaron muchas películas protagonizadas por astronautas y, por lo tanto, ambientadas en el espacio; pero lo curioso no es eso, sino que el espacio es planteado como un lugar de autodescubrimiento, cuyos viajes le cambian la vida a sus personajes.

Llegué a esa conclusión luego de ver Ad Astra, la última película de Brad Pitt, que es la historia ingeniero que perdió a su padre cuando se fue en una misión a Neptuno, y 20 años después no se sabe si sigue vivo o muerto, hasta que le proponen ir a buscarlo, pues necesitan saber si ese planeta es habitable.

Así es como el personaje de Roy McBride emprende su propio viaje, pero antes de hacerlo, notamos que su vida ha estado vacía por todos los años que no tuvo a su papá, por lo que es incapaz de comprometerse y se ha enfrascado en el trabajo. Sus diálogos con él mismo preguntándose cómo sería la vida si su padre hubiera estado, son muy constantes, y el viaje a Neptuno es la forma que encuentra para darle respuesta a todas sus dudas.

Es por lo anterior que, a primera vista, Ad Astra puede parecer una película de ciencia ficción, y en su forma lo es, pero detrás tiene un discurso que habla sobre el autodescubrimiento, las relaciones personales, así como la necesidad de aprender a perdonar y dejar ir; argumento que encuentro parecido al de First Man, protagonizada por Ryan Gosling, que también habla de un astronauta pero que en realidad sí existió, ya que una biografía, un tanto diferente, de Neil Armstrong.

En ella, se habla del primer hombre que pisó la luna, pero también se explora su contexto familiar y una gran pérdida que tuvo antes de viajar al satélite natural: la de su hija pequeña que falleció a los pocos años de nacida, con la que no deja de alucinar durante todo el viaje. Aquí también se planeta que es solo en el espacio que por fin puede sanar su pérdida y dejarla ir.

Aunque ambas películas son distintas por lo que tratan, comparten personajes muy similares que solo encuentran la liberación cuando se van del planeta, y es en medio de las estrellas y la oscuridad que son capaces de recuperar el sentido de una vida que para ellos pareciera estar vacía.

No sé si es coincidencia o no, pero si estas películas que se desarrollan en el espacio, funcionan para reflexionar sobre los procesos tan complicados por los que pasan los seres humanos, entonces que se sigan haciendo muchas más, pues esas historias nos recuerdan que nuestra naturaleza que se mantiene sin importar el lugar a donde vayamos.