Culiacán vivió días de mucha tensión e inseguridad debido a la captura de Ovidio Guzmán, uno de los lideres del cartel de Sinaloa. Las primeras noticias de este hecho se hicieron notar por redes sociales tanto en videos como en fotografías de balaceras, redadas, camiones incendiados hasta la fuga de reos de un penal en la ciudad. Estos acontecimientos se vieron agravados al exponer el grado de armamento con el que cuenta el cártel, que incluso, es de mayor alcance y calibre que el del ejercito mexicano.

La situación se salió de control al estar amenazada y sitiada la ciudad, así como la captura de familiares de algunos militares, por lo cual, se opto por liberar a Ovidio Guzmán. La decisión fue la mas acertada en ese momento, ya que la vida de muchas personas se encontraba en peligro, sin embargo, eso no exonera la culpa del gobierno al exponer de esa manera a la ciudadanía.

Al tiempo que ocurrían estas actividades, el presidente de la republica estaba en camino a tomar un vuelo comercial con destino a Oaxaca, como marcaba su agenda. Fue en este momento donde reporteros lo abordaron para saber un poco mas sobre la emergencia en Sinaloa, para lo que el mandatario respondió que se les informaría después en una rueda de prensa dada por el gabinete de seguridad.

Parece increíble que el presidente no quisiera hablar sobre el tema, incluso que lo evitara. A el, que le gusta concentrar el poder, que es cronista de la situación económica y política, pero solo cuando le conviene. Porque la situación de Culiacán fue el resultado de una pésima estrategia y ejecución para detener a uno de los capos mas importantes del país, el dice que no se puso en riesgo a la población tras la liberación de Ovidio, cuando en realidad ellos propiciaron esta crisis de seguridad.

Tras los eventos, la información no es clara porque no quieren hacerse responsables de lo que paso. Primero mencionan que era un simple rondín y que identificaron al hijo del chapo, después que fue planeado y luego que tenían una orden de extradición, para que finalmente el presidente diga que no tenia conocimiento de la situación. Es una vergüenza que medios internacionales pongan en evidencia al gobierno, como el New York Times, que menciona que no fue uno el capturado, sino, dos, y que uno de ellos logro escapar y armar toda esta crisis para rescatar a su hermano.

El presidente prefiere hablar sobre un partido de béisbol en lugar de la situación de seguridad, prefiere decir que hay que olvidar y seguir con nuestra vida, que hay paz, seguridad y que todo va muy bien. Aunque, todo esto solo suceda en su cabeza, porque la realidad es muy distinta, y esta realidad, solo demuestra que Andrés Manuel es un presidente cobarde e incapaz.