En el contexto global en el que se desenvuelven las profesiones de ingeniería se hace necesario garantizar que los egresados de estas profesiones cuenten con las competencias y las habilidades requeridas. Ello es lo que ha motivado la aparición de los procesos de acreditación internacional, de los cuales el más reconocido es el sello EUR-ACE, otorgado por la Red Europea para la Acreditación de la Educación en Ingeniería (ENAEE, por sus siglas en inglés). Este esquema de evaluación de la educación en ingeniería integra la visión y las necesidades de todos los actores de la educación ingenieril: las universidades, los empleadores, los estudiantes y las asociaciones profesionales. Esto permite tener un marco de referencia global para las competencias técnicas y transversales requeridas para el ejercicio eficaz, seguro y ético de la ingeniería en cualquier parte del mundo.

Las acreditaciones de los procesos educativos en todos los niveles y modalidades escolares se realizan de manera voluntaria por instituciones educativas tanto a nivel nacional como internacional para asegurar la calidad de sus programas académicos. Estas acreditaciones requieren una autoevaluación de la institución con respecto a un estándar previamente establecido por un organismo facultado para otorgar la misma. Una vez revisada la documentación por parte del organismo, se realiza una visita de campo en las instalaciones de la institución de educación donde se avala el cabal cumplimiento de sus objetivos a través de los resultados de sus indicadores de excelencia académica, los recursos empleados para ello y una eficiente gestión de su unidad académica y administrativa. Los evaluadores realizan un reporte de hallazgos y vierten recomendaciones al organismo para determinar el otorgamiento de la acreditación. En función al cumplimiento de la institución educativa, el período de acreditación puede variar en su duración. El otorgamiento de una acreditación representa por lo tanto el punto de partida para que el programa académico distinguido inicie un proceso permanente de mejora de sus procesos académicos y para la institución educativa de sus procesos directivos con el fin de garantizar la mejor educación para sus estudiantes y para la sociedad.

La robustez del marco EUR-ACE permite que los estudiantes y egresados de programas acreditados bajo este distintivo puedan lograr una mayor movilidad internacional tanto en el ámbito académico como en el profesional, facilitando el ejercicio de su profesión en el contexto globalizado en el que vivimos. Igualmente facilita la continuidad de la formación a través del acceso simplificado a programas de posgrado acreditados igualmente bajo el sello EUR-ACE. Estas ventajas se hacen extensivas a las universidades que albergan dichos programas a través de la mejora continua, derivada de los procesos de acreditación, así como de la posibilidad de establecer vínculos con instituciones igualmente acreditadas alrededor del mundo, permitiendo extender sus actividades de docencia, investigación y vinculación a cualquier parte.

Por su parte, los empleadores y asociaciones profesionales se benefician del marco EUR-ACE, ya que éste les otorga una garantía de que los egresados de programas de ingeniería acreditados cuentan con las competencias y habilidades requeridas para el desempeño profesional exitoso, en un marco de seguridad, ética y sostenibilidad.