Para Alma y Paty, quienes me

 iluminan cuando se me acaban las ideas

La Revolución Mexicana; iniciada en 1910, la Revolución Mexicana fue un conflicto armado impulsado por el descontento de los mexicanos hacia la dictadura de Porfirio Díaz; como resultado de la misma, las estructuras sociales y políticas del país tuvieron una metamorfosis.

A lo largo del tiempo, en los libros de historia se hace énfasis en figuras como Francisco I. Madero, Emiliano Zapata, Pancho Villa, Victoriano Huerta o Venustiano Carranza. Sin embargo, muchas veces se pasa por alto a terceros que tuvieron un gran impacto dentro de esta guerra civil; la mujer.

La mujer en estos años fue pieza fundamental a lo largo de la Revolución Mexicana; madres, hijas, hermanas o esposas aportaron su granito de arena. En vez de quedarse dentro de sus hogares rezando para que los hombres de la casa salieran victoriosos en cada enfrentamiento, las mujeres no se cruzaron de brazos y optaron por levantar sus hogares para poder acompañar a los soldados; estas mujeres fueron conocidas como “adelitas” o “soldaderas”.

Dentro de los papeles que ejercieron, las adelitas fueron enfermeras, espías, cocineras, procuradoras del honor de las jóvenes, y, lo más importante, guerrilleras que no tenían miedo de disparar su escopeta hacia el bando enemigo. Debido a la disputa, se rompió aquella burbuja en la que la mujer estaba aislada de la vida pública; con la participación de las soldaderas, las mujeres comenzarían a ser incluidas en asuntos de interés general de los que antes eran excluidas debido a que creían que eran incapaces de comprender, además de ser marcadas en la sociedad con la etiqueta de “marimachas”, o de dudosa moralidad. La obligación moral de la guerra y la industrialización fueron factores a favor del surgimiento de estas revolucionarias; sentarían las bases para más adelante el sufragio femenino.

Pese a la importancia de la participación de este gremio, no se les ha rendido el mismo honor que a las figuras que se mencionaron con anterioridad; su contribución a la lucha se ha visto opacada debido a que en la cultura popular y en la divulgación histórica se les ha asociado como una figura pintoresca que fue subordinada al guerrillero; solo se llega a hacer una breve mención de las mismas como una historia paralela a la Revolución, lo cual no debería ser.

Como consecuencia de esto, no se saben los nombres de estas heroínas anónimas. No obstante, a pesar de que se desconoce sus identidades, se tienen registros de una ellas; su nombre fue Adela Velarde Pérez; Adela es la encargada de que las “adelitas” porten este título.

Quien diría que las “adelitas” se llaman así debido a una de ellas.

Recuerda ser valiente.

Bibliografía:

Comité Ejecutivo Nacional. (2018, 20 de noviembre). Las «Adelitas», el secreto mejor guardado de la Revolución Mexicana. Secretaría de Vinculación con la Sociedad Civil. http://sociedadcivil.pri.org.mx/Articulos/Articulo.aspx?y=9415.

Rosas, P. (2022, 20 de noviembre). Revolución mexicana: quién fue Adela Velarde, la mujer que dio nombre a las mujeres conocidas como “adelitas”. BBC News Mundo. https://www.bbc.com/mundo/noticias-63669329.