Rosario Viveros Altieri, de enseñar a muñecas a formar líderes transformadores
24/06/2021
Autor: Fernanda Bretón
Foto: Misraim Álvarez Bolaños

La docencia es una de sus grandes pasiones, hoy como coordinadora de la Consultoría Estratégica sigue formando a jóvenes y adultos para alcanzar sus sueños.

Desde niña supo que su vocación estaba en la docencia, sobretodo en la enseñanza en el área de ingeniería y aunque la vida le ha permitido también hacerlo en el área de negocios, Rosario Viveros sabe que lo que marca y hace la diferencia en un docente no es solo el conocimiento, sino la apertura y confianza que logre generar en el estudiante. Aquí presentamos su historia.

¿Cómo llega el llamado de vocación de la docencia?

La realidad es que desde pequeña se da este llamado, mi mamá es educadora así que hay algo de herencia, cuando estaba en la primaria y secundaria ponía a mis muñecas sentadas como si estuvieran en clase, este se convirtió en mi método de estudio.

Estando en prepa descubro que soy muy buena para explicar sobre todo en materias de ciencias exactas, ayudaba a mis compañeros a estudiar y culminando el primero de prepa, el director me ofrece dar el curso de extraordinarios a mis compañeros que el año anterior habían reprobado física y química, digamos que esta se convierte en mi primera experiencia formal dando clases.

Después, comienzo dando clases particulares a los hijos de las amigas de mi mamá y algunos vecinos, a los hermanos de mis compañeros, etc., posterior a ello ya en la universidad en sexto o séptimo semestre, se me presenta la oportunidad de trabajar dando clases.

Tiempo después inicia un largo periodo en el Colegio Ángeles en donde estuvo como profesora de matemáticas, física y química, además de fungir como Directora de Preparatoria.

 

¿Cómo se da su llegada a UPAEP?

Después de ocho años en el Ángeles, surge la oportunidad de ingresar a la UPAEP específicamente en Prepa Santiago, me quedo un año completo dando clase a primero y segundo; estando en este periodo de mi vida, decidí estudiar la maestría en matemáticas y un buen día me habla Luis Montiel y me comenta que me quieren ofrecer la Dirección de Prepa UPAEP Santa Ana.

Ya en Santa Ana, aún siendo directora no dejé de dar clases, creo que a un alumno lo conoces no en la dirección sino en el salón de clases. Hubo un buen entendimiento con los muchachos, siempre me sentí muy apoyada por la institución.

Estando en Santa Ana, me habla el Ing. Gonzalo Gómez, quien era el Director Financiero en ese momento y me propone la dirección del área de compras, pero no dejé de dar clases, regresé como docente en Santiago.

 

El hecho de dar clases me encanta, pero el estudiar también, por ello comienzo la maestría en finanzas, la culmino y me invitan a dar clases en el área de negocios.

 

¿Cómo ha sido vivir todo este proceso?

He recibido muchas satisfacciones, porque cuando los estudiantes han hecho las evaluaciones para los profesores de hora clase, he obtenido buenos resultados, tuve el honor de recibir el premio al mérito docente 2020, lo cual me llena totalmente de satisfacción.

Los sábados sigo dando clase en maestría, una o dos en abierta y entre semana en ingeniería o en la escuela de negocios. En UPAEP ya tengo 13 años, muy contenta, trabajando en compras casi 10 años y hace poco me ofrecen la coordinación de Consultoría Estratégica en el área de Vinculación.

El poder combinar la gestión y la docencia ha sido fantástico.

A raíz de esta pandemia, el volver las clases virtuales fue algo padrísimo, porque entré a varios de los cursos de la universidad, se pueden hacer juegos, escapes y creo que ha funcionado muy bien y he recibido muy buenos comentarios por parte de mis alumnos.

 

¿Cuáles han sido los aprendizajes que le han dejado sus estudiantes?

Por supuesto que con los estudiantes aprendes mucho, muchas veces es espontaneidad, el hecho de que como adulto muchas veces vemos las cosas más complicadas, y ello lo ven menos complejo; a veces tenemos que salir de nuestra cajita de adultos y meternos en la cajita de adolecente que tiene menos responsabilidades y ve las cosas más sencillas, eso ha sido un aprendizaje que he recibido de ellos.

En cuanto a mis alumnos de maestría que son docentes también, cuando escuchas lo que platican sobre las condiciones y obstáculos a los que se enfrentan, es cuando aprendes que con muy poco se puede hacer mucho y no necesitamos un gran software para dar una clase sino simplemente conocimiento y la experiencia del maestro.

Las experiencias que los estudiantes comparten contigo son significativas, el poder guiarlos y acompañarlos en situaciones complejas, también es parte de ser docente, además de convertirte en mejor persona.

 

¿Cuál es el diferenciador que marca al profesor UPAEP?

Precisamente creo que es el saber escuchar al alumno y tener las armas y herramientas para ayudarlos. Afortunadamente la universidad tiene una amplia gama de cursos para preparar a los docentes, porque si quieres formar profesionistas de primera, tienes que ser un docente de primera, es imposible exigir algo que no se tiene.

Creo yo que un profesor UPAEP, es alguien comprometido y que se entrega en su ejercicio docente. “Un profesor sentado es un profesor cansado” y si el alumno te ve cansado no va a encontrar la motivación para estar en clase.

 

Otros datos.

Tiene un amplio gusto por la lectura, sobre todo novelas de suspenso, thrillers y detectives; además de declararse fan de las series policiacas y de suspenso.

Confiesa tener un gran amor por los chocolates, trata de comer uno diario. Disfruta mucho estar con sus hijos y su esposo.

El poder platicar y conversar con sus amigas de la secundaria es algo muy enriquecedor sobre todo ahora en tiempos de pandemia.