¿Cómo están? Espero que hayan hecho la tarea de la semana pasada. Yo por mi parte lo hice, no estuvo mal, al contrario el llorar ¡me alegro el día!
El día de ayer estaba frustrándome porque me di cuenta de que hay algunas cosas en mi vida que no están yendo por donde yo esperaba y llegué a una desesperación que dije: “calma…pongámonos a pensar” (así es, hablo mucho conmigo).
Después de pensar un buen rato con una taza de chocolate (si no han tomado chocolate, ¡¿qué esperan?!), llegué a cosas interesantes. Dentro de esas conclusiones están “no puedes controlar todo”, “las cosas pasan por algo” (esta me la dijo mi mamá hace tiempo), “a veces se escoge mal, pero no significa que sea malo”, “a veces tienes que dejar que las cosas fluyan”, “no tienes porque decepcionarte tanto ante lo que pase”, entre otras cuantas…
De todas mis conclusiones, el punto principal al que quiero llegar el día de hoy es que…no todo tiene que ser de una forma. Cuando planeas tus actividades (o tus planes de vida) y los pones en marcha, te das cuenta de que a veces no todo va a salir como esperas y que las cosas no pasen como uno quiere nos va a hacer sentir mal, por lo que la pregunta ahora es ¿qué sigue? ¿qué puedo hacer ahora?
El otro día hablé por teléfono con una amiga quien me empezó a decir que aplicó para dos empleos y que afortunadamente ¡la aceptaron en ambos! El primero es el trabajo de sus sueños, pero tiene una condición, la cual es mudarse de la ciudad (cosa que no tenía planeado y que nunca ha querido vivir fuera de su ciudad), pero por otro lado tiene la segunda opción de quedarse en Puebla y ganar más. Ahora hay un gran dilema porque cualquier opción que elija tiene sus ‘pros’ y ‘contras’.
Esta chica aún no tiene idea de lo que va a hacer, pero es razonable que esté indecisa… con lo que me gustaría que se quedaran el día de hoy de esta pequeña anécdota ajena, es que no todo tiene que ser de una forma. Puede ser diferente, puede que no te guste o bien… te puede llevar a otro lado que quizás no habías conocido y que no la estás pasando tan mal como lo pensabas. Pero no lo sabrás si solo te frustras y no haces algo al respecto para que no te afecte mucho.
Quisiera dejarles otra tarea, la cual implica en que la siguiente vez que hagan un plan y lo lleven a la acción, tengan en mente que puede que al final las cosas no salgan bien. Y si llega a salir terrible la situación, acepten pasarlo mal, ya que algo nuevo saldrá de ese momento y tal vez los lleve a cosas mejores. Tengan un gran día, la vida es demasiado corta que van a querer más tiempo para vivirla.
Si desean desahogarse o simplemente que alguien los lea pueden escribir al correo robertojaime.cuautle@upaep.edu.mx o a mi página de Facebook Roberto Cuautle. Y pues nada…nos hablamos en la próxima nota.