[Proyecto aeroespacial que cambia su entorno aquí y ahora.]

El proyecto del satélite AZTECHSAT-1 ha hecho soñar a la comunidad de UPAEP por años, y seguramente lo seguirá haciendo por otros más, las posibilidades de la investigación aeroespacial nos dejan claro que el límite no existe, solo basta con levantar la mirada al cielo, sin embargo, esto comienza aquí y ahora en la Tierra, con cada cálculo, prueba y ensayo de todos los investigadores, maestros y compañeros que materializan la teoría.

Rebeca Dorantes Carvajal estudiante de Ingeniería Biónica, se involucró en el proyecto en 2017, y aunque no estaba particularmente interesada, fue gracias a que, sus amigos de Ingenierías como Mecatrónica y Electrónica ya eran parte del equipo y hablaban mucho del satélite, que ella sintió curiosidad por aquello que “sonaba a algo grande”, como ella misma lo describe.

“Aprendí sobre comunicaciones y telemetría, y después esa práctica me sirvió para cuando tuve materias de especialidad”, su expectativa al entrar al proyecto era conocer cómo funciona un satélite, pero al enfocar su área de conocimientos a algo distinto descubrió el beneficio implícito en cada iniciativa universitaria, su mente se abrió a la posibilidad; “aprendí sobre Bioseñales, por ejemplo, y otras cosas que no tienen tanto que ver con el satélite pero que se pueden implementar en mi carrera” el rumbo de su vida universitaria y profesional habían cambiado para siempre.

Con la Doctora María de la Luz García Cruz trabajó en la Estación Terrena, que es donde se lleva a cabo la comunicación con el satélite, hizo el Cálculo de Enlace Satelital y el trabajo de redacción e investigación, para Rebeca ser parte del equipo estudiantil encargado del satélite le ha dejado buenas experiencias, una de ellas fue durante un verano en el que estuvo trabajando intensivamente en el laboratorio a lado de otros estudiantes y otra fue durante el Critical Design Review (CDR), en el que se puso muy nerviosa a la hora de exponer su trabajo frente a investigadores, autoridades y gente de la NASA, sin embargo, durante el receso el astronauta José Hernández se acercó a ella y la animó reconociendo su trabajo “y el hecho de que sea él quien te está motivando, es algo que no se me va a olvidar”, comenta emocionada.

“Se están creando literalmente corrientes de pensamiento, en cada subsistema del satélite hay gente que está siendo líder de verdad, aprendes de ellos a trabajar en equipo, inspiran a seguir trabajando, el proyecto del satélite se une mucho con la misión de UPAEP porque no solo te enseña cosas teóricas sino también cosas de trabajo y de vida” reflexiona Rebeca; su proyecto de vida incluye dedicarse a la investigación, aplicar todo lo que aprendió al cuidado del medio ambiente y seguir transformando.