Pese a que el tiempo y número de exposición de películas nacionales en el cine ha aumentado (pasando de un 10 a un 21%) aun hay muchos estrenos de los cuales nos perdemos, pero con suerte no será el caso de ésta película.

No todo el cine mexicano es tan malo…
“Los adioses” dirigida por Natalia Beristaín, es una mirada a la vida de Rosario Castellanos (interpretada por Karina Gidi), una de las literatas más emblemáticas de la historia mexicana, por su obra siempre consciente y reflexiva por las condiciones de vida de los indígenas y las mujeres.

La joven Rosario vive contraria a su época, una sociedad regida por hombres, aunque ello no le impide abrirse paso en él, a través de la literatura. La película comienza en uno de los puntos cumbre de su carrera, contrastando con el retrato de su turbulenta relación amorosa entablada con Ricardo Guerra, a quien da vida Daniel Giménez Cacho.

Rosario, siempre transparente y abierta en sus poemas, es el reflejo de la vida en una época de la cual aún quedan reminiscencias. Karina Gidi y Giménez Cacho logran encarnar sus personajes de una forma increíble; ella, pese a que su personaje es en su mayoría callado y contenido, logra dar sentimiento y total veracidad a los versos escritos por la autora, haciendo sonar aún más fuerte su discurso de protesta hacia el status quo, y por otro lado, él logra nivelar la balanza puesto que a través de sus parlamentos y acciones podemos tener un panorama mucho más claro su relación con Rosario pues ésta, se logra abordar también desde la perspectiva masculina de la época.

La película es una bomba pues se plantean sentimientos de gran magnitud, condensados en una hora y media, y es precisamente esta condensación la que logra una mayor intensidad. Es la perfecta conjunción entre un delicado trabajo de conceptualización y arte, reflejado en sus vestuarios y sets, hasta el trabajo técnico, que en términos fotográficos y sonoros logran comunicar mucho con muy poco, pues pese a que su propuesta es sencilla y austera cierran perfectamente el círculo de construcción y logran hacer que el público mirando a la pantalla el discurso logre conectar con el y meterse de lleno en la historia.

El filme logra poner la mirada en Rosario como una de las defensoras de los derechos de la mujer, siendo una de las feministas mas destacables de la historia mexicana y tiene un discurso aún vigente: la lucha por la equidad de género retratada (en este caso) en una relación de pareja. Todo esto y muchas más razones hacen de esta película, una de las obras mexicanas que definitivamente deberías ver. ¡Apoyemos el cine nacional!