Aspiraciones y realidades: visita de Jennifer M. Granholm a México
02/02/2022
Autor: Dr. Juan Carlos Botello
Cargo: Profesor Facultad de Comercio Internacional y Logística

La Secretaria de Energía de Estados Unidos, Jennifer M. Granholm, emitió el 21 de enero pasado la siguiente declaración sobre su reciente viaje a la Ciudad de México. Este es el texto íntegro de la misma, extraído de la página de internet del Departamento de Energía de E.U.A:

“Quiero agradecer al gobierno mexicano la cálida bienvenida y el diálogo abierto sobre nuestro futuro energético conjunto durante los últimos dos días. Estados Unidos valora enormemente nuestra relación con México y ve una enorme promesa de energía renovable para impulsar la competitividad de América del Norte.

A lo largo de mi viaje, me reuní con altos dirigentes mexicanos, incluido el Presidente Andrés Manuel López Obrador, así como con la industria, los legisladores y la sociedad civil, para mantener un diálogo franco y respetuoso. En cada reunión, transmitimos expresamente las verdaderas preocupaciones de la Administración Biden-Harris sobre el potencial impacto negativo de las reformas energéticas propuestas por México en la inversión privada estadounidense en México. La reforma propuesta también podría obstaculizar los esfuerzos conjuntos de Estados Unidos y México en materia de energía limpia y clima. Debemos mantener y mejorar los mercados energéticos abiertos y competitivos que benefician a América del Norte. Me aseguraron que México está comprometido a apoyar la energía limpia y a resolver las disputas actuales con los proyectos energéticos dentro del estado de derecho.

México ha sido bendecido con una abundancia de energía renovable potencial que, si se realizara plenamente, podría alimentar a su propio país al menos 10 veces, crear millones de empleos bien remunerados y desarrollar una extraordinaria industria de exportación orientada a un mundo necesitado de soluciones de energía limpia.

Hemos expresado nuestro entusiasmo por trabajar con el gobierno mexicano para avanzar en sus objetivos climáticos y hacer crecer una economía de energía limpia competitiva y diversificada. Entre otras prioridades, queremos explorar la colaboración en el desarrollo de la energía geotérmica, la integración de las energías renovables en la red, la reducción del metano y la electrificación rural.

Las relaciones de colaboración y de futuro son lo que América del Norte necesita para mantener nuestra ventaja competitiva en el mundo, y la Administración Biden-Harris espera trabajar con México para asegurar que ambos tengamos éxito en la creación de un camino mutuamente respetuoso hacia nuestros objetivos energéticos compartidos.

Estados Unidos valora nuestra relación con México, que durante décadas ha aportado un gran beneficio mutuo. México es nuestro segundo mayor socio comercial, y las empresas estadounidenses son los mayores inversores de México. Tenemos un interés fundamental en que México y su gente tengan éxito”.


Sin duda, la declaración de la Secretaria está llena de aspiraciones y realidades. De aspiraciones porque hay que recordar que E.U.A. no tiene amigos sino intereses y, el vecino país del norte ve enormes oportunidades para sus empresas. No está mal que ofrezcan sus servicios sobre todo cuando se hace en el marco legal y de competitividad. La realidad es que el ambiente político de incertidumbre que se vive en México respecto a la contrarreforma del sector eléctrico-energético no da una buena señal a los inversionistas, congresistas y gobierno norteamericano. La visita a México por parte de la Secretaria no fue de cortesía sino en defensa de la legalidad y el respeto a los tratados y acuerdos comerciales que ambos países han suscrito.