Beautiful Boy 
09/10/2024
Autor: Marian Louvier

"Beautiful Boy"  es una película que por su elección de elenco, podría asumirme una película que dejará mucho que desear a su público por el pasado actoral del cast principal, pero demuestra la versatilidad de ellos en su labor actoral. La narrativa explora de una manera tan sublime pero acertada las profundidades del alma humana, explorando los lazos familiares, la lucha contra la adicción y la búsqueda desesperada de redención. Basada en las memorias de David y Nic Sheff, la película nos adentra en un viaje emocionalmente devastador pero increíblemente honesto, encarnado magistralmente por Steve Carell y Timothée Chalamet.

La actuación de Carell es una verdadera revelación. Abandonando cualquier rastro de sus papeles cómicos e icónicos anteriores, se sumerge de lleno en el papel de David. Este es  un padre desgarrado por la angustia de ver a su hijo caer una y otra vez en el ciclo de la adicción. Con una mezcla magistral de vulnerabilidad y determinación, Carell logra transmitir la complejidad de las emociones de un hombre que lucha por mantenerse a flote en medio de la desesperación.

Por su parte, Chalamet ofrece una actuación igualmente impresionante como Nic, el hijo cuya batalla contra la adicción es el núcleo emocional de la película. Con una intensidad y sinceridad palpables, Chalamet logra capturar la lucha interna de Nic mientras lucha por encontrar su camino hacia la sobriedad. Su interpretación es un tour de force emocional que te deja sin aliento en cada momento.

La química entre Carell y Chalamet es simplemente extraordinaria y muy poco predecible por cualquier persona que conozca sus trabajos previos. Cada interacción entre padre e hijo está cargada de una autenticidad que te sumerge aún más en la historia. Son momentos de dolor, amor, frustración y esperanza que se entrelazan de manera poderosa, creando una conexión emocional con el público que perdura mucho después de que la película haya terminado.

En resumen, "Beautiful Boy" es una obra maestra cinematográfica que no solo nos muestra el impacto devastador de la adicción, sino que también nos recuerda el poder del amor, la esperanza y la redención. Con actuaciones excepcionales, una dirección hábil y eficaz añadido de una narrativa profundamente conmovedora y humana. Es una película que te dejará reflexionando y a pesar de no tener producciones abrumadoras, crea un vínculo íntimo entre el espectador y los sentimientos.