La comunidad mundial tiene el gran reto de promover la sustentabilidad ambiental y mitigar el deterioro del planeta. Solo el 9% de los plásticos se reciclan, mientras que el 18% se incinera y el 72% restante termina en vertederos, generando una problemática ambiental a gran escala.
Ante los diferentes escenarios que se están viviendo en México y el mundo, es importante analizar las tendencias que no solo afectarán el presente, sino que también modelarán el futuro de la industria del plástico, en donde todos los protagonistas de la sociedad están involucrados, como es el caso de la industria, comunidades, universidades y gobiernos, para preservar el medio ambiente, expresó Mario Alberto López Mendoza, Director de la Facultad de Ingeniería Química Industrial de la UPAEP.
En ese sentido, destacó tres elementos fundamentales que, según él, serán cruciales en los próximos años. El primero de estos elementos es la apuesta por la economía circular. Enfatizó la necesidad de desarrollar estrategias que garanticen la sostenibilidad ambiental en una industria que enfrenta desafíos significativos debido a la generación masiva de desechos plásticos.
El compromiso con la economía circular implica repensar cómo se producen, utilizan y reciclan los plásticos, buscando minimizar su impacto ambiental.
El segundo aspecto resaltado por López Mendoza es la creciente relevancia de los materiales renovables y los bioplásticos. Señaló que la industria está encaminándose hacia una mayor utilización de recursos renovables y plásticos biodegradables, en un esfuerzo por reducir la dependencia de materias primas no sostenibles y mitigar los problemas asociados con la acumulación de residuos plásticos.
El tercer punto, señala López Mendoza es la integración de avances tecnológicos, como la digitalización, la inteligencia artificial y la ciencia de datos, para optimizar procesos industriales. Destacó la importancia de adoptar tecnologías innovadoras para lograr procesos más eficientes y competitivos, al tiempo que se reduce la huella de carbono y se minimiza la contaminación.
"En el ámbito de los autos eléctricos y otros sectores, nuestra meta es hacer que la producción sea ecológicamente más amigable, es decir, más sostenible y menos consumidora de energía. Esto implica trasladar nuestro enfoque hacia fuentes de energía renovable", expresó Mario López.
En cuanto a las materias primas, el director enfatizó el papel fundamental de la Ingeniería Química en la transición hacia materiales más sostenibles. Se proyecta que los ingenieros químicos de las próximas generaciones, especialmente hacia 2030 y 2040, deberán centrarse en el diseño de materiales que incorporen biopolímeros y fuentes renovables, como una alternativa a las tradicionales derivadas del petróleo.
"La sustitución de fuentes de petróleo en la fabricación de plásticos es un tema pendiente en nuestra agenda. La Ingeniería Química desempeñará un papel crucial en este cambio, diseñando materiales innovadores que puedan reemplazar de manera efectiva las fuentes convencionales", afirmó López Mendoza.
Asimismo, hizo hincapié en la importancia de que la Ingeniería Química se involucre en toda la cadena de producción y consumo, resaltando la necesidad de cerrar el ciclo en la economía circular. En este sentido, el director señaló que aunque existen avances notables en la producción de plásticos más sostenibles y en el reciclaje, es esencial abordar la conexión entre estos dos extremos.
"La cadena de distribución, tanto en términos de materias primas como de plásticos utilizados, es fundamental para lograr la economía circular. Debemos comprometernos no solo en la producción y reciclaje, sino también en optimizar la cadena de distribución para fomentar el reúso y el reciclaje efectivo", expresó López Mendoza.
Daniel Pedraza Hernández, profesor de la Facultad de Ingeniería Química Industrial de la UPAEP, dijo que ante las recomendaciones hechas por la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), y que a pesar de las prohibiciones implementadas en más de 120 países respecto al uso de plásticos de un solo uso, el consumo y la producción de plásticos han aumentado de manera significativa en las últimas dos décadas.
Subrayó que, alarmantemente, solo el 9% de los plásticos se reciclan, mientras que el 18% se incinera y el 72% restante termina en vertederos, generando una problemática ambiental a gran escala.
En respuesta a esta situación, Pedraza Hernández presentó diversas acciones y visiones que están siendo implementadas en la industria para abordar la contaminación plástica. Entre ellas, destacó el programa "30-20-30", que busca alcanzar un 30% de reciclaje para el año 2030. Este programa impulsa la transición hacia una economía circular en la que los plásticos no solo se consumen y desechan, sino que se integren nuevamente al ciclo productivo.
Otra acción clave es la eliminación de envases plásticos problemáticos, aquellos cuyo reciclaje resulta complicado. Pedraza Hernández señaló que se están desarrollando nuevos materiales y tecnologías para reducir o eliminar estos envases, promoviendo la eficiencia y sostenibilidad de la economía del envase plástico.
El profesor también destacó la importancia de garantizar que todos los envases plásticos sean 100% reciclables. Para lograr este objetivo, se exploran nuevas fuentes de materiales, como los biopolímeros, y se trabaja en la mejora de la tecnología de reciclaje.
En la búsqueda de soluciones, Pedraza Hernández mencionó cinco megatendencias que marcarán el camino hacia un uso más sostenible del plástico. La electromovilidad en la fabricación de autos ecológicos, el uso de energías renovables en la producción de plásticos, el desarrollo de monomateriales para facilitar el reciclaje, y la integración de la inteligencia artificial en la formulación y fabricación de plásticos son algunos de los aspectos clave.
Para concluir, Pedraza Hernández resaltó la importancia de la legislación equilibrada y flexible para impulsar estas acciones y visiones. También enfatizó el compromiso de la UPAEP en formar a estudiantes que sean parte de la solución, presentando proyectos innovadores que aborden la problemática del plástico y contribuyan a la construcción de un futuro más sostenible. La universidad, a través de iniciativas como el convenio con el Instituto de Comercio Exterior italiano, busca fomentar la creatividad y el compromiso de los estudiantes con el medio ambiente y el cambio climático. En UPAEP, la ecología y la responsabilidad son pilares fundamentales en la formación de ingenieros químicos comprometidos con la búsqueda de soluciones innovadoras para los desafíos actuales.