El diseño como motor de identidad
26/06/2025
Autor: Lizbeth Natali Rojas Robles
Foto: Antonio Gutierrez Jimenez

El diseño trasciende la estética para convertirse en una herramienta transformadora que revela lo invisible y construye conexiones significativas entre marcas y personas.

Las Primeras Jornadas Internacionales de Diseño e Innovación Visual en UPAEP se llevaron a cabo el pasado 16 de junio con la ponencia magistral del maestro Ivan Kulikov, director creativo de Terminal Design Branding Agency, profesor de HSE University y quien actualmente participa en Global Summer. Su conferencia "Las marcas y su impacto global" exploró el poder del diseño como generador de identidad en un entorno global cada vez más interconectado y competitivo.

Kulikov enfatizó que una marca trasciende el concepto de logotipo o nombre comercial atractivo, constituyéndose como una construcción compleja que integra valores, principios y mensajes coherentes. Subrayó que el éxito de una marca se fundamenta en una investigación exhaustiva sobre el público objetivo, el mercado y el contexto cultural, ya que "un diseño que no conecta con las personas pierde todo sentido".

Como caso de éxito presentó Hydroid, un innovador equipo de buceo cuya identidad visual se inspiró en formas ondulantes del agua combinadas con códigos digitales que aluden a tecnología avanzada, transmitiendo valores de modernidad, precisión y confiabilidad. Su lanzamiento en Estados Unidos en 2019 superó las dos mil unidades vendidas, consolidándose en el mercado internacional.

El experto profundizó en un fenómeno que ha transformado radicalmente la industria del branding en Rusia: la salida masiva de grandes marcas extranjeras del mercado ruso después de 2022. Esta coyuntura generó un vacío que impulsó a diseñadores y empresarios locales a desarrollar marcas propias para satisfacer las necesidades específicas del consumidor ruso.

Lo más relevante de este proceso, según Kulikov, ha sido la oportunidad para recuperar y reinterpretar símbolos, costumbres y tradiciones de la cultura rusa, dando origen a propuestas con identidad auténtica. "Las marcas rusas ya no imitan referentes externos; ahora narran sus propias historias", afirmó.

El conferencista explicó cómo estos proyectos locales han ganado presencia en diversos sectores —desde la industria alimentaria hasta la moda—, no solo ocupando el espacio dejado por las multinacionales, sino también restableciendo una conexión auténtica con el consumidor ruso mediante imágenes, conceptos y lenguajes visuales arraigados en su identidad cultural.

Kulikov destacó que uno de los mayores desafíos y virtudes del diseño contemporáneo es conseguir que cada marca refleje genuinamente la cultura a la que pertenece, comunicando mensajes honestos que respondan a la realidad de su entorno y usuarios. "Una marca bien construida habla el mismo idioma que su gente, comprende sus códigos y les otorga significado", puntualizó.

Para concluir su intervención, el maestro exhortó a los estudiantes a considerar siempre la dimensión ética y cultural de su trabajo. Enfatizó que el diseño va más allá de la estética o creatividad: "Es una poderosa herramienta para transformar realidades, narrar historias significativas y visibilizar lo que normalmente pasaría inadvertido".

Con esta valiosa reflexión finalizó la primera conferencia magistral de las Jornadas, invitando a los futuros diseñadores a crear propuestas con propósito, capaces de trascender fronteras sin perder su esencia e identidad local.