El pasado 17 de septiembre, fue el Día Internacional de los microorganismos, aquellos “bichitos” que son demasiado pequeños como para ser vistos con el ojo humano, que son responsables de muchos cambios en la materia orgánica e inorgánica, que nos enferman, pero que también nos curan, que nos proporcionan alimentos como el yogurth, la cerveza, el vino, el queso, el pan, entre otras cosas.

En todo el planeta hay millones de microorganismos, tanto bacterias, como levaduras, mohos, hongos, virus y protozoarios, y todo el tiempo estamos conviviendo con ellos, pues no solo están en superficies “sucias”, o son responsables del queso y el pan de nuestra hamburguesa, sino que tienen un papel importante en nuestra salud, pues muchos de ellos se encargan de que podamos defendernos y que nuestro cuerpo funcione correctamente porque en nuestros intestinos, órganos, piel, boca, oídos y ojos, tenemos más de 100 microorganismos, que sin los cuales no podríamos vivir.

Además de eso, hemos sabido emplearlos para mejorar o resolver muchos problemas que acontecen la vida moderna de los seres vivos. Por ejemplo, la E. coli es una bacteria benéfica para nuestro cuerpo, vive en nuestros intestinos y ayuda al cuerpo a descomponer y digerir los alimentos, sin embargo, hace 40 años, biotecnólogos lograron sintetizar insulina humana con ayuda de esta bacteria de forma segura y económica, pues antes, la insulina administrada a pacientes diabéticos era obtenida de los cerdos, lo cual era costoso y no siempre era compatible con todos los pacientes.

Los Staphylococcus spp. son un género de hongos que disminuyen la competencia en el sistema inmunológico, lo que nos llevó a producir vacunas. Los hongos que pertenecen al género Ganoderma spp., son sumamente importantes, pues nos ayudan a la biorremediación (limpieza de ecosistemas contaminados con hidrocarburos o metales pesados) y son usados como tratamiento para el cáncer de mama. Los mohos que pertenecen a Aspergillus spp. producen fármacos y enzimas que nos ayudan en diversos tratamientos. Los hongos que pertenecen a Trichoderma spp. funcionan como pesticidas naturales y degradan los colorantes en la producción de papel. Las bacterias que pertenecen a Lactobacillus spp. son muy importantes pues son utilizadas para la conservación de alimentos y regulan el funcionamiento intestinal.

Así como los anteriores, hay muchos más microorganismos benéficos para la naturaleza y el ser humano, que conservan el equilibrio de la vida y que nos ayudan a resolver muchos problemas que vivimos hoy en día, por lo cual, es importante conocer su importante papel en la vida en la Tierra y entender que incluso los seres más pequeños del planeta pueden lograr cosas increíbles.