Cuando entras a la carrera de Medicina, muchos compartimos la idea de entrar para poder salvar vidas, si le preguntas eso a estudiantes de nuevo ingreso probablemente te digan esa misma respuesta, la cual te pone a reflexionar la importancia del valor de una persona, esa es nuestra mayor motivación, por eso nos preparamos tantos años, nos desvelamos, pasamos tiempo sin comer, sacrificamos parte de nuestra vida personal por prepararnos, es por esto que nos encontramos ante una carrera muy humanitaria, puesto que vemos enfermos, no enfermedades, toda persona que entra a un consultorio algunas veces no viene por alguna enfermedad, sino por alguien que los pueda escuchar, es ahí que depositan su confianza en nosotros, en que los vamos a hacer sentir bien de alguna manera, eso es otra motivación que compartimos como médicos, que las personas lleguen a sentirse tan confiados en nuestros manos que depositen ciegamente su vida en que los podamos ayudar.

Es ahí cuando vale la pena todo el esfuerzo realizado, cuando por primera vez te dan las gracias por ayudar, un sentimiento indescriptible recorre tu cuerpo, es ahí cuando sabes que lo lograste, y sabes que no te debes detener, sino que debes seguir luchando para poder seguir siendo mejor y poder ayudar a más personas, esas son las motivaciones de un médico en mi opinión.

Recuerdo cuando nos comentó el Doctor Caballero como proyecto el Grupo Estudiantil “Hermanos de Sangre”, me dejó fascinado la idea, al empezar a trabajar en ella y al darme la oportunidad de poder ser presidente del grupo, cuando nos topamos con nuestra primera actividad en la Feria de la Salud, te das cuenta de cómo puedes aportar tanto con el gesto de donar sangre, el saber que puedes ayudar a salvar una vida, nadie sabe cuándo y ojalá y no la necesitemos, pero Hermanos de Sangre, queremos que esa preocupación sea mucho menor, pues tenemos una familia de donadores, los cuales son los alumnos de esta Universidad, que sin pedir nada a cambio, están dispuestos a ayudar a otro hermano que lo necesite ciegamente.

Con esta primera actividad nos brindó como grupo el ver en que podemos mejorar para el siguiente año, los errores que cometimos y los aciertos que tuvimos, el invitar a más alumnos que se unan al grupo para poder crecer nuestra familia, y con respecto al último evento que tuvimos, pudimos incrementar nuestras listas de donadores altruistas, no fue un trabajo sencillo, pues

desde antes estuvimos haciendo consciente sobre la importancia de ser donador, hablamos sobre los mitos que hay sobre la donación de sangre para que las personas pierdan el miedo y sepan la ayuda que están aportando con cada gota de sangre que le aportan al mundo, pues ahora ellos saben qué aportaron para poder salvar a alguien. Esto es lo mejor de este grupo, que cada vez nos vamos haciendo más grandes y estamos concientizando a las personas para que donen sangre, diría que es una tarea para nada fácil, pero al saber todo lo bueno que estamos logrando es un esfuerzo que vale la pena para todo aquel que se quiera unir al Grupo.

Uno de nuestros valores como personas es el poder ser empáticos con lo que ocurre a nuestro alrededor, no ser indiferentes ante las personas que necesitan nuestra ayuda, tanto como alguien que necesita de nuestra sangre, así como alguien que no puede cruzar la calle, el ayudar a una persona es muestra de nuestra humanidad, nos hace más sociables y nos une, esto es algo que viví de cerca en el grupo de hermanos de sangre, y es algo que se está perdiendo, cada vez nos da igual lo que pase a nuestro alrededor mientras no nos afecte, pero siempre he tenido la idea de que si tenemos la oportunidad de ayudar, tenemos la responsabilidad de hacerlo, es así que invito a todas las personas que estén leyendo esto, ya sea de la manera más pequeña que puedan, que nunca pierdan su humanidad y siempre estén al servicio de aquella persona que lo necesite, y pido a la Universidad que siga con el apoyo que le ha brindado al grupo de hermanos de sangre para poder seguir creciendo como humildad y sigamos reforzando esa fraternidad que nos caracteriza.