El libro. Mi lugar seguro y otros significados
24/06/2021
Autor: Valeria Grajales Ortiz

Se escucha con frecuencia que leer es para inteligentes, lo cual a mi parecer es una idea muy limitada de lo que es y para qué sirve la lectura. Actualmente las plataformas de contenidos visuales como Facebook, Netflix y otras influyen para que los jóvenes generen y refuercen la idea de que leer es aburrido, les gusta lo que es rápido de consumir, sin pensar y sin cuestionamientos; pienso que la lectura y el concepto de los libros tiene muchos significados. Para explicar mi opinión me gusta la descripción de Taibo (2013, p. 46), de lo que los libros son: 

Tabla para el náufrago, escudo para el bueno y horca para el ruin, paraguas para el sol y la lluvia, capote de torero, ladrillo que hace paredes que hace casas que hace ciudades que hace mundos. El libro es jardín que se puede llevar en el bolsillo, nave espacial que viaja en la mochila, arma para enfrentar las mejores batallas y afrontar a los peores enemigos, semilla de libertad, pañuelo para lágrimas. El libro es cama mullida y cama de clavos, el libro te obliga a pensar, a sonreír, a llorar, a enojarte ante lo injusto y aplaudir la venganza de los justos. El libro es comida, techo, asiento, ropa que me arropa, boca que besa mi boca. Lugar que contiene el universo.

Un libro puede significar un encuentro mágico con una historia, que pareciera se construye de un día a otro, como si fuera el libro correcto en el momento indicado para leerlo. La historia de mi encuentro con el libro me gusta, porque para mí simplemente estuvo y permanece llena de amor. 

Desde que tengo memoria mi papá me ha leído libros por las noches, cuando era pequeña mi día siempre finalizaba con una historia romántica sobre alguna princesa o una historia de aprendizaje de uno de los libros para niños que formaban parte de mi librero personal. Recuerdo la primera vez que elegí mi propio libro y lo leí yo sola, fue cuando tenía alrededor de 6 años, recuerdo que mi papá me llevó a comprar un libro que él necesitaba para el trabajo y me llevó tomada de la mano al estante de los libros para niños pequeños. Elegí tres libros, todos eran cuentos muy cortos de Cenicienta, La Sirenita y Blancanieves. Él siempre me ha dicho: “Cuando los acabes compraremos otros”. Otras personas que han contribuido al desarrollo de este maravilloso recuerdo son mis padrinos, ellos son profesores de literatura y siempre me han guiado, desde los títulos a escoger hasta las reflexiones que tengo sobre aquellos libros que leí. Me comparten libros que forman parte de sus colecciones personales y siempre han estado ahí para mí. Me gustan estas historias y recuerdos porque me hacen sentir acompañada, guiada por las personas que más quiero y valoro: mi familia. Me gustaría ampliar el significado del libro a uno más diverso, sumando a la construcción de Benito Taibo que la lectura para mí es un refugio creado con amor por mi padre y mis padrinos Mary y Carlos, un lugar de constante descubrimiento, desde los títulos que escojo o que me fueron recomendados, hasta los momentos y lugares en los que decido abrir y comenzar a adentrarme en la historia que alguien más decidió compartir con el mundo entero. 

BIBLIOGRAFÍA

Taibo, B. (2013). Persona Normal . México: Planeta Mexicana.