Quiero contarles acerca de mi experiencia en la plática “No hay familia perfecta” que se llevó a cabo en torno a jornadas por la familia el pasado semestre. Prepa UPAEP organizó una semana en la que tuvimos diferentes actividades que se implementaron en relación con la familia y su importancia. A cada uno de los alumnos se le permitió escoger entre diferentes pláticas con temas como: violencia en el noviazgo, emociones y sentimientos, noviazgo y matrimonio, ETS y anticonceptivos, pornografía y sexting, amor vs uso, autoestima-suicidio y depresión, resiliencia y adaptación al cambio, dignidad humana y divorcio y familia rota, que fue el que yo escogí.
En el taller “No hay familias perfectas” nos hablaron acerca de la familia, su importancia en nosotros los adolescentes, pero también de lo difícil que es muchas veces mantenerla. Uno de los aspectos que me llamó más la atención de esta plática fue el gran papel que ocupan los papás en toda nuestra vida, aunque tengan más importancia en esta etapa de la adolescencia. Un tema que me llamó mucho la atención fue que, muchas veces, no le tenemos confianza a nuestros padres, en ocasiones les tenemos más confianza a personas que apenas conocemos. Nuestros padres nos conocen de toda la vida: ellos saben cómo somos, qué nos gusta, que nos caracteriza, qué es lo que nos apasiona, que es lo que no nos gusta, cuáles son nuestros intereses, entre otros. Debemos de tener más confianza en nuestros padres, entiendo que casi siempre tenemos miedo o pena de contarles algo que nos pasa. Ya no queremos escuchar un regaño o un consejo en tono de represalia. Hay que entender que nuestros papás quieren lo mejor para nosotros y lo expresan así, pero es su forma de ser.
En la plática nos explicaron que el apoyo más grande e importante que tenemos son nuestros papás, al igual que nuestra familia, estos dos grupos importantes son nuestra red de apoyo en cualquier conflicto que tengamos. Es muy importante que reflexionemos acerca de todo el apoyo que tenemos en casa y que debemos aprovechar. La familia siempre te puede ayudar, así sea muy poco pero lo hace. Si pudieras tomar un poco de tu tiempo para platicar con tus papás y familia te darás cuenta de lo maravilloso que es convivir aunque sea unos minutos. Uno de los temas principales fueron las familias perfectas, que en realidad es algo que no existe. Las familias perfectas no son las que tienen mucho dinero o las que están papá e hijos o mamá e hijos. Las familias siempre tienen problemas, no hay una que no los tenga. Casi siempre los matrimonios tienen algunas diferencias y muchas veces eso genera divorcios y es cuando la familia se rompe. Debemos de entender que es muy complicado que dos personas tengan todo en común y piensen igual, es importante que busquemos una solución para esto, y que tengamos en mente que una familia es un equipo, así que todos deben aportar y buscar soluciones para una convivencia sana. Es muy importante implementar el diálogo para la resolución de problemas y siempre tratar de guardar la compostura. Pero los conflictos no solo existen entre los papás, también entre los hermanos: muchas veces los hermanos no congenian en algunas cosas, en mi caso me llega a pasar con mi hermano, nos peleamos porque él es muy inquieto y yo muy tranquila, a veces me desespera, pero me he dado cuenta de que, si él no hubiera existido, me hubiera quedado sola y no hubiera tenido con quien reírme y jugar. En ocasiones no nos damos cuenta de lo valiosas que son las personas, hasta que las perdemos. Debemos valorar a las personas y amarlas, por esta razón intento ser más paciente con mi hermano. Estoy agradecida con la vida que tengo.
La familia debe de estar unida para poder salir adelante, debemos de apoyarnos en las buenas y en las malas. Nuestros seres queridos son un apoyo que la vida nos brinda para tener alguien quien nos pueda orientar en todo momento. Pienso que es una forma de enseñarnos a perdonar, el perdón es muy importante. Debemos de conocer nuestro origen, desde tus abuelos hasta tus papás para saber por qué razón actuamos así o somos así. Creo que es importante que se hablen de estos temas, ya que es vital conocer la importancia de estar acompañados en esta vida. Hay que reflexionar sobre las cosas en las que estamos fallando o en las que nos hace falta trabajar más. Muchas veces no nos damos cuenta de lo que pasa a nuestro alrededor, siempre hay que estar al pendiente de las personas a nuestro alrededor y debemos cuidarlas para que se mantengan fuertes y sanas. Si aprendemos a convivir con las personas de nuestro alrededor de forma amistosa, créeme que todo será diferente y se evitarán tantos conflictos y peleas. Yo, Ximena, me comprometo a perdonar, a cambiar, a expresarme, a ser mejor persona, a ser más paciente, a dialogar, a no discutir, a razonar, a aceptar mis errores, pero también es necesario que tú que estás leyendo esto comiences con un pequeño cambio en tu forma de actuar o pensar y verás la gran diferencia que vas a provocar en las personas que te rodean, ya que con pequeñas acciones podemos generar un cambio y podemos llegar a ser un ejemplo. Concluyo con esta frase de Benjamin Franklin “La paz y la armonía constituyen la mayor riqueza de la familia”.