Te has preguntado ¿cuál es el origen del término meme? Todo inició en 1976, cuando el británico Richard Dawkins creó la palabra meme, pues él pensó en un monosílabo similar a gen derivado del griego mimeme (aquello que es copiado), pero parecido a memoria o a la palabra francesa même (lo mismo). Este término tiene la raíz léxica: mimesis (imitación) y mem (memoria).

Un meme por lo general combina una frase con una imagen o fotografía, aunque también se presenta mediante videos y animaciones que se reproducen miles o millones de veces en las redes sociales, es decir, se vuelve viral.

Todos podemos ser víctimas de un meme. Entre más exótica, graciosa o incómoda sea la situación que proyectan o la reacción que logran producir, más posibilidad de contagio tienen. Cabe mencionar que el contagio se da de dos maneras:

Progresivo: Aumenta poco a poco, conforme crece el poder de convicción. Se trata de una forma de transmisión lenta y reflexiva.

Explosivo: Un poco de poder de convicción hace que sea aceptado por mucha gente de forma instantánea. Es una forma de transmisión rápida y más impulsiva.

Para lograr que un meme sea atractivo y viral se necesita desarrollar ciertas habilidades: capacidad de observación y análisis de la información; memoria para recordar imágenes o frases; pensamiento crítico; capacidad de síntesis; apropiación tecnológica; uso de herramientas digitales para la edición; y difusión del meme.

Finalmente, los memes propagan mitos, mentiras, estereotipos y odios, pero también esclarecen, denuncian, critican y animan a la reflexión social. De hecho, en México existe una gran cantidad de memes que destacan por su ingenio y expresan asuntos de interés público.