No me entiendan mal: a los alemanes también nos gusta comer, pero no creo que conozca alguna cultura que celebra su comida más que México. Me he encontrado con franceses y ellos valoran mucho su cocina, la cual no es considerada una de las mejores del mundo sin razón. Pero aún así… la relación entre los mexicanos y su comida es especial. Por eso no es muy sorprendente que unas de las preguntas que escucho más seguidas son “¿Te gusta la comida mexicana?” y “¿Qué comida tienen en Alemania?” y, pues la verdad es, y me imagino que ustedes ya sabían eso muy profundamente en su corazón, que en Alemania no tenemos esa variedad de miles de platos diferentes como aquí, y otra verdad es que tampoco nos importa tanto.

Pero voy a responder la primera pregunta: sí, me gusta la comida mexicana. Para mí tiene demasiada carne y grasa, pero aprendí a vivir con eso, especialmente gracias a la ensalada que me preparo cada noche para disfrutar la frescura de las legumbres. Me fascina que en cada ciudad y cada pueblo sirven otro plato típico o por lo menos una versión de ello. Hay una variedad enorme de comidas diferentes y la verdad es que no entiendo a las personas (extranjeras) que se rindieron de probar nuevos platos porque todo sabe a grasa y o porque todo está hecho de masa, carne, crema, queso y salsa. Y eso cuando sólo hay tacos, quesadillas, memelas, sopes, huaraches, enchiladas, gorditas, chilaquiles, flautas, molletes, … [agrega más].

Al contrario, como he aprendido en mi tiempo aquí, la comida mexicana ofrece algo para todos, aunque para vegetarianos sí es más difícil llevarse muchas experiencias culinarias. Y supongo que a los veganos ni siquiera los dejan entrar al país. Es tan difícil probar todo y aún más difícil recordar qué sabe bien y qué no. En otras partes del mundo creen que nada más se come tacos, pero incluso si ahora comenzara a nombrar todos los tipos de tacos que hay, estaríamos aquí aun cuando termina el semestre.

Después de haber respondido la primera pregunta, de una manera que espero sea satisfactoria, quiero tratar la segunda. La respuesta más simple es “está complicado”.

Aquí generalmente, se cree, según lo he escuchado, que nos alimentamos todo el día y todos los días de salchichas y cerveza. Déjenme decirles que están mal. Comemos pan y papas y para acompañarlo nos permitimos una cerveza. Okay, esto fue broma, aunque los dos ingredientes sí forman una parte muy importante de nuestra alimentación, pero en general no comemos mucha comida típicamente alemana. Más bien se come una mezcla de ingredientes de toda Europa y otros países cercanos. Eso significa que se puede encontrar feta de Grecia igual de fácilmente como pierogi de Polonia o croissants de Francia. La manera de cocinar en Alemania está muy influida de otros países europeos y asiáticos por lo cual es extraño cuando uno se da cuenta que no es así en todo el mundo.

Quizá por esa costumbre de comer alimentos de todos orígenes los alemanes somos muy abiertos para la comida de otros países y tal vez se podría decir que vamos al extranjero principalmente para probar los sabores de allí y para ver el sol, por supuesto.