La película que, en lo que va del año, ha conquistado miles de corazones. Jojo Rabbit es el nuevo filme de Taika Waititi, quien no solo la dirige, sino que también interpreta a uno de sus personajes principales.

Como su título sugiere, cuenta la historia de “Jojo”, un niño pequeño perteneciente a las hileras nazi, que tiene como mejor amigo imaginario a Adolf Hitler (interpretado por el propio director), quizá para este punto su premisa puede sonarte bastante polémica, arriesgada y con mucho que perder, sin embargo curiosamente, este es su mayor acierto, pues busca rayar en la farsa y en lo absurdo del nazismo a través del ojo infantil. 
Es una película dotada de carisma y emociones con personajes entrañables que encarnan las distintas posturas y visiones que se vivían en la época nazi y que pasa de lo excéntrico a lo sentimental.

Jojo, con su ojo infantil e inocente, tiene como amigo imaginario a Adolf Hitler y muestra una emoción y un fanatismo poco convencional por convertirse en un soldado, justo como su padre, sin embargo, su visión del mundo cambia cuando descubre que su madre (Scarlett Johanson) ha refugiado a una niña judía, y debido a una lesión que ha sufrido en el campamento de entrenamiento para niños, se ve obligado a pasar tiempo en casa y convivir con ella. 
Es a partir de este punto en su historia que, el humor e inocencia inicial se van difuminando poco a poco, mostrando lo crudo del mundo, de la guerra y su represión, mostrando que Jojo está creciendo y madurando, en primera instancia intentando entender por qué su madre ha defendido al que el cree, es el enemigo, y en segunda, el amor y las relaciones sentimentales además de ver en modo sutil y disimulado, la represión homosexual que existía en ese contexto. 

No se puede evitar mencionar que Roman Griffin Davis (Jojo) y su madre (Scarlett) tienen actuaciones increíbles, ella, encarnando el ojo y calidez materna de una manera magistral.

A su vez, su estética visual es muy llamativa y entretenida pues aprovecha y explota bastante bien el ojo infantil. La película cuenta también con diálogos ingeniosos y entretenidos que atrapan al espectador. 

Sin más por el momento, Jojo Rabbit es una película que remite a la infancia y se deshace de los prejuicios, que te sacará más de una risa, y por lo menos una lágrima, si no la has visto, corre a tu sala más cercana. ¡Que la disfrutes!