Desde el 2006, la unidad de inteligencia de la revista inglesa The Economist, elabora el Índice de Democracia a nivel mundial, que brinda una fotografía del estado de la democracia en 165 estados independientes y dos territorios. El índice está compuesto por 5 categorías que incluyen el proceso electoral y pluralismo, funcionamiento del gobierno, participación política, cultura política y libertades civiles. En función de los puntos obtenidos en una serie de indicadores dentro de las categorías mencionadas, cada país se clasifica en uno de los cuatro tipos de régimen: "democracia plena", "democracia imperfecta", "régimen híbrido" o "régimen autoritario".
Los resultados del Índice de 2022 arrojaron que casi la mitad (45.3%) de la población mundial vive en algún tipo de democracia, o dicho de otra manera, de los 167 países que componen el Índice, 72 son considerados como países democráticos. En el Índice de 2021, sólo había 21 países en democracia plena, pero para 2022 se sumaron Francia, España y Chile, lo cual significó un avance para esta categoría. Las democracias imperfectas se incrementaron en 2022, pasando de 43 países a 48, mientras que los países con regímenes híbridos pasaron de 34 en 2021 a 36 en 2022, es decir, el 17.9% de la población mundial vive en países con regímenes políticos híbridos. Los 59 países con regímenes autoritarios no tuvieron movimiento con respecto al año anterior. Por otro lado, más de un tercio (36.9%) de la población mundial vive en algún país con tintes autoritarios, particularmente con una gran participación destacan China y Rusia. De acuerdo con los datos anteriores, el resultado del Índice 2022 demuestra que hubo un estancamiento en el avance de la democracia a nivel mundial, aún considerando las excepciones que se dieron en Europa occidental. Destacan las categorías intermedias que presentan signos de inestabilidad política, probablemente ocasionada por la afectación de algunas libertades individuales y colectivas por la pandemia. Pero el caso que más afectó a la inestabilidad fue la invasión de Rusia a Ucrania, destacando la represión y censura en territorio ruso.
Ahora bien, ¿cómo le fue a México en este índice? Pues no hay buenas noticias. México sale reprobado con una puntuación de 5.2 lo que lo sigue posicionando como un régimen híbrido -eso ya lo sabíamos-, pero eso no es lo peor, ya que en el índice de 2021 teníamos una mejor posición (aunque igualmente reprobados) con 5.5 puntos en promedio. Nos encontramos dentro del “top ten” de los países con peor desempeño democrático, ocupando el noveno lugar al lado de países como El Salvador, Hong Kong, Túnez, Iraq, Jordania, Haití, Rusia, Bielorrusia y Burkina Faso. México salió rankeado en el lugar 89 de 167 países, cayendo tres lugares con relación al índice de 2021. Las categorías que obtuvieron el peor resultado para México fueron: 4.64 puntos para funcionamiento del gobierno, 5.5 puntos para libertades civiles y 1.88 puntos para cultura política. Los resultados lo explican todo. Explican el desastre del actual gobierno federal. Explican la pésima percepción que se tiene de nuestro país, pero también explican el riesgo inminente en el que nos encontramos si perdemos la poca democracia que nos queda. Luchemos por lo que tanto anhelamos, procesos democráticos libres y ciudadanos libres.