Considero que es importante que nuestros lectores conozcan algunos aspectos generales sobre la Organización del Tratado del Atlántico Norte antes de conocer los detalles de la reciente solicitud oficial de ingreso de Finlandia y Suecia a esta organización. La OTAN es una alianza de países de Europa y Norteamérica. Funciona como un vínculo entre estos dos continentes.
Actualmente cuenta con 30 países miembros, la mayoría de ellos europeos. La OTAN tiene como objetivo principal garantizar la libertad y seguridad de sus países miembros por medios políticos y militares. De acuerdo con su página web, uno de los medios políticos para alcanzar la libertad es la promoción de valores democráticos, así como permitir que los países miembros cooperen en cuestiones relacionadas con la defensa y la seguridad para solventar problemas, fomentar la confianza y de esta manera evitar conflictos a largo plazo.
Sin embargo, cuando los esfuerzos diplomáticos no dan frutos, la fuerza militar emprende operaciones de gestión de crisis bajo la cláusula de defensa colectiva del tratado fundacional de la OTAN o por mandato de las Naciones Unidas, por sí sola o en cooperación con otros países y organismos internacionales. Actualmente, la adhesión a la OTAN está abierta a cualquier otro estado europeo dispuesto a respaldar los principios y contribuir a la seguridad del área del Atlántico Norte. Para aquéllos países interesados, la OTAN cuenta con un plan de acción para su adhesión.
En ese sentido, este miércoles 18 de mayo, Finlandia y Suecia solicitaron oficialmente su adhesión. Jens Stoltenberg, secretario general de la alianza militar recibió con beneplácito la solicitud que salda una cuenta pendiente en materia de seguridad y es que, dadas las recientes amenazas de Rusia hacia estos países sólo era cuestión de tiempo para que se pronunciaran por su adhesión. Se espera que, en unos meses, se acepte su adhesión, aunque para los presidentes de Turquía y Hungría el proceso podría retrasarse más. El mismo miércoles Recep Tayyip Erdogan, bloqueó una votación de procedimiento para que la OTAN avance rápidamente con las solicitudes de adhesión, y el primer ministro húngaro, Viktor Orban, sigue bloqueando incluso un intento de la Unión Europea de imponer un embargo al petróleo ruso, que forma parte de un sexto paquete de sanciones dirigidas a Moscú por su guerra contra Ucrania.
Así mismo, Ankara quiere que Finlandia y especialmente Suecia pongan fin a lo que el Sr. Erdogan ha calificado de apoyo a "organizaciones terroristas" en sus países, principalmente el Partido de los Trabajadores del Kurdistán, o PKK, así como que levanten las prohibiciones de exportación de ciertas ventas de armas a Turquía. En un discurso ante sus legisladores en el Parlamento el miércoles, Erdogan criticó ampliamente el apoyo occidental a los grupos kurdos que Ankara considera una amenaza terrorista. De acuerdo al diario The New York Times, las acciones de los dos líderes autoritarios muestran las tensiones que se están creando a medida que la guerra se prolonga, las conversaciones de paz parecen no ir a ninguna parte, y las sanciones occidentales están contribuyendo al dolor económico y a la alta inflación en E.U.A., así como en Rusia. Por último, mientras la OTAN y el bloqueo interno deciden la adhesión de Finlandia y Suecia, Rusia sigue amagando con el uso de armas nucleares si estos países se suman a la organización, eso considerando, que antes no emprenda ninguna acción para invadirlos.