Azul; desde pequeña he tenido una gran afinidad hacia el color azul y sus diversas tonalidades. Integrante de los colores primarios, el azul se caracteriza por ser una gama que hace alusión a la tranquilidad, paz, confianza, amistad, limpieza, tecnología, naturaleza (agua, viento) …etc. Contemplarlo brinda calma al corazón y a la mente; hace que todo esté en armonía.
El nombre de este color se incorporó a la lengua castellana a través de los árabes, que usaban el término “lazawárd” para citar este tinte, pues, el azul era extraído de la piedra lapislázuli (lāzaward).
Teniendo esto como contexto, en torno a esta coloración existe una expresión que se usa para indicar que en la vida nada es fácil, que todo toma tiempo y que requiere de un esfuerzo: -“quien quiera azul celeste, que le cueste”-, se tiene la convicción de que la frase llegó a México durante el Virreinato. Alguna vez hemos escuchado esta frase, no obstante, más allá de que la misma rime, tiene un fondo histórico ligado al arte. Hoy sabremos de donde nació esta oración.
Todo inicia con el Renacimiento; la característica de esta época reside en que fue un movimiento cultural en dónde la literatura, escultura, arquitectura y pintura se desarrollaron con una mayor libertad compositiva. Si nos ponemos a analizar las pinturas renacentistas, podremos percatarnos de que algunas de ellas cuentan con un mayor o menor uso del azul en diferentes degradados, principalmente el azul ultramarino y azul celeste.
En la actualidad es demasiado fácil que tengamos a la mano estos colores debido a componentes sintéticos y procedimientos que nos brindan diversas tonalidades, sin embargo, durante el renacimiento no se contaba con la tecnología y conocimientos actuales.
El que los pintores incluyeran azul dentro de sus lienzos indicaba que eran personas de renombre que contaban con una buena economía, pues, el azul era extraído del lapislázuli, una gema de tono ultramarino. En sus tiempos, el lapislázuli llegó a ser cuatro veces más costoso que el oro por su dificultad de extracción y transporte hacia otros países: el yacimiento principal en ese entonces se encontraba en Afganistán. Una vez teniendo la gema, el siguiente paso era triturarla para obtener un polvo fino que posteriormente era dado a los artistas.
Si para obtener el azul ultramar se llevaba a cabo esta técnica, para conseguir un tono más claro, los pasos a seguir eran más laboriosos; para llegar al mismo se debía de rebajar el color haciendo uso de otros polvos como el magenta y blanco.
Los que se encargaron de poner en alto a esta coloración fueron Leonardo da Vinci, Alberto Durero y Fra Angélico.
¿Quién diría que el lapislázuli fue cuatro veces más caro que el oro? Suena disparatada la idea, pero fue cierto.
Recuerda apreciar el arte.
Bibliografía:
Hernández Velasco, I. (2020, 2 de febrero). ¿Cuál es el origen del nombre de los colores en la lengua española? BBC News Mundo. https://www.bbc.com/mundo/noticias-51268345#:~:text=El%20adjetivo%20azul%20ingres%C3%B3%20en,%2C%20lo%20denominaban%20%22l%C4%81zuward%22.
México Desconocido. (s.f.). El origen de la frase “El que quiere azul celeste, que le cueste”. https://www.mexicodesconocido.com.mx/el-origen-de-la-frase-el-que-quiere-azul-celeste-que-le-cueste.html