Oportunidades del nearshoring en México: ¿Está listo el país?
12/09/2024
Autor: Fernanda Bretón
Foto: Misraim Álvarez Bolaños

El nearshoring ofrece a México grandes oportunidades para el desarrollo económico, pero enfrenta retos clave en infraestructura, energía y certeza jurídica.

El pasado 29 de agosto, el maestro Tulio de Nova Ferrero, Director de Estrategias e Inversión de Scotia Wealth Management, impartió una conferencia en UPAEP titulada “Nearshoring: Oportunidades para México”. Durante su exposición, destacó el contexto actual de esta estrategia de relocalización de cadenas de suministro, las ventajas que ofrece para la economía mexicana y los retos que deben afrontarse para capitalizar plenamente esta oportunidad.

El concepto de nearshoring se refiere al traslado de procesos productivos o logísticos de empresas globales a países cercanos, lo que permite reducir costos de transporte y facilitar el control y la supervisión de operaciones. En los últimos años, México se ha beneficiado de este fenómeno debido a su cercanía con Estados Unidos, su principal socio comercial, y su vasta red de tratados comerciales.

De Nova Ferrero subrayó que este auge no es reciente, ya que desde la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994, México ha jugado un papel clave en las cadenas de valor globales. Sin embargo, la guerra comercial entre Estados Unidos y China, el impacto de la pandemia de COVID-19 y las tensiones geopolíticas recientes han acelerado la tendencia hacia el nearshoring, posicionando a México como un destino atractivo para empresas que buscan diversificar sus operaciones y reducir riesgos.

Entre las principales ventajas que el nearshoring ofrece a México, De Nova Ferrero identificó los siguientes puntos:

  1. Ubicación geográfica privilegiada: México comparte una extensa frontera con Estados Unidos, lo que facilita el comercio y la inversión. Además, tiene acceso tanto al Océano Pacífico como al Atlántico, lo que lo convierte en un hub logístico de primer nivel.
  2. Tratados comerciales: México tiene más de 50 tratados de libre comercio, lo que le permite acceder a mercados de todo el mundo, brindando flexibilidad y oportunidades a las empresas que decidan establecerse en su territorio.
  3. Crecimiento en el sector manufacturero: El sector manufacturero en México ha mostrado un crecimiento sostenido, lo que lo convierte en un pilar clave para aprovechar el nearshoring. La alta calidad de la manufactura mexicana, especialmente en sectores como el automotriz y la tecnología de punta, ha atraído a grandes empresas internacionales.
  4. Inversión extranjera directa (IED): La llegada de empresas extranjeras no solo impulsa las exportaciones, sino que también genera empleos, mejora los salarios y fomenta la inversión en infraestructura.
  5. Mano de obra calificada: La eficiencia y la competitividad de la mano de obra mexicana son atractivos para los inversionistas. Además, el crecimiento en la oferta de profesionistas y técnicos especializados refuerza el atractivo del país para nuevas inversiones.

A pesar de las ventajas mencionadas, el maestro Tulio de Nova Ferrero señaló que México enfrenta varios retos estructurales que deben atenderse para maximizar los beneficios del nearshoring.

  1. Infraestructura energética insuficiente: Uno de los principales obstáculos es la falta de capacidad suficiente en el sector energético. De Nova Ferrero enfatizó que, aunque México tiene un buen nivel de generación de energía, la transmisión es deficiente, lo que dificulta que nuevas empresas puedan conectarse de manera eficiente al sistema eléctrico. La inversión en este sector es esencial para evitar cuellos de botella.
  2. Falta de infraestructura logística: Si bien algunas ciudades fronterizas, como Tijuana y Ciudad Juárez, han logrado capitalizar el nearshoring, existen amplias zonas del país que carecen de la infraestructura necesaria para atraer inversión. Se necesitan mejoras en carreteras, puentes, ferrocarriles y parques industriales, así como en la infraestructura digital y las telecomunicaciones.
  3. Certeza jurídica y Estado de Derecho: Uno de los puntos más cruciales que destacó De Nova Ferrero es la necesidad de garantizar la certeza jurídica en el país. La inversión extranjera requiere de un entorno donde se respeten los contratos, las reglas sean claras y se ofrezca seguridad tanto para las empresas como para sus inversiones. La falta de certidumbre en la aplicación del Estado de Derecho y la inseguridad en algunas regiones del país pueden desalentar la llegada de nuevas inversiones. "Sin certeza jurídica y regulatoria, las empresas no tendrán confianza para invertir capital en México", apuntó.
  4. Mejora del entorno laboral: Si bien la mano de obra mexicana es altamente competitiva, De Nova Ferrero instó a seguir invirtiendo en la formación de trabajadores y profesionistas. Es crucial que México siga adaptándose a las nuevas tecnologías y normas laborales internacionales para mantenerse competitivo en la atracción de empresas globales.

El nearshoring tiene el potencial de transformar la economía mexicana en los próximos años. Se estima que las exportaciones podrían aumentar hasta 80 mil millones de dólares en los próximos cuatro años si México logra aprovechar esta tendencia. Sin embargo, para que este crecimiento sea sostenible, se requerirá una inversión significativa en infraestructura, energía y capacitación laboral.

De Nova Ferrero concluyó que, aunque las oportunidades son enormes, México necesita mejorar su entorno regulatorio y garantizar la certidumbre jurídica para atraer y retener inversiones extranjeras a largo plazo. Solo así, el país podrá consolidarse como un actor clave en la reconfiguración de las cadenas globales de suministro.