Mujeres, dignidad y una mejor comunicación
12/04/2025
Autor: Dra. Eva María Pérez Castrejón
Foto: Jefa de promoción de Posgrados y Modalidades a Distancia UPAEP

Comparto mi experiencia después de ser parte de un contexto donde se expusieron teorías feministas, perspectivas de género, violencias y nuevas masculinidades como un avance en los estudios de las ciencias sociales donde las mujeres discuten sobre nuestro rol en la sociedad actual, pero que también se reflexiona el vínculo con el género masculino desde un enfoque cultural, social, económico, etcétera.

Actualmente, los estudios de género están trascendiendo de tal manera que son parte de los fenómenos globales donde es importante invitar a revalorar el concepto de respeto y dignidad de las mujeres en una sociedad donde las diferentes teorías se siguen desarrollando; pero más allá de éstas, es importante ponerlas en práctica desde cada una de las acciones de las mujeres que creemos en el respeto a la dignidad humana, como una lucha constante y espacio de reflexión, donde es necesario continuar con la exploración de las tendencias que hay en su definición y su funcionalidad y práctica social, con el afán de tener una vida digna, sin discriminación, violencia o exclusión social.

Afortunadamente, en algunas regiones del mundo empieza a haber apertura para investigar y analizar cómo los estudios de género apoyan la dignidad y el respeto. Estas expresiones diarias de las mujeres se ven muchas veces estropeadas y con pérdida de credibilidad cuando no hay congruencia entre lo que se dice, por lo que se lucha y lo que se hace hasta con los vínculos más cercanos, como por ejemplo las amistades, las compañeras de trabajo o simplemente otra mujer; con esto me refiero a mujeres que se dicen feministas y luchadoras sociales y protegen a hombres que atentan contra ellas de diferentes maneras. Entre mujeres hay agresiones y descalificaciones, toleran el maltrato, no respetan las familias o bien hasta descalifican los liderazgos de mujeres en las organizaciones.

Es importante tener acciones que contribuyan con el bien común y el respeto a los derechos humanos. Ser CONGRUENTES va más allá de mil expresiones que solo se las lleva el aire, desde cada trinchera se pueden hacer grandes acciones, no es necesaria la violencia sino la ayuda social a quienes son más vulnerables. No hay que callar: comuniquemos y construyamos una mejor sociedad.