“Voto razonado y responsable”
- El primer paso consiste en informarte de las propuestas de cada candidato y discernir cuál te parece más pertinente, justa y conveniente para la situación en que vivimos. El sitio web del INE https://candidaturas.ine.mx/ te ayudará mucho: escoge el cargo que te interese a nivel federal (presidente, senadores o diputados federales) y navega… si quieres conocer los cargos a nivel local, ve a https://www.ine.mx/voto-y-elecciones/elecciones-2024/candidatas-y-candidatos-locales-2024/ y allí escoge el Instituto de Elecciones de tu Estado y analiza los candidatos a gobernador, diputados locales o presidentes municipales, según sea el caso. Informarse quiénes son los candidatos y cuáles son sus propuestas es el primer acto de responsabilidad para el votante.
- Es bueno dar un segundo paso, sobre todo cuando se elige al Congreso: entender bien la propuesta del partido al que pertenecen. ¿Por qué? Porque muchas veces los legisladores votan en “bloque” las leyes y demás decisiones que se turnen a ellos. Actualmente, a nivel nacional, en México existen 7 partidos políticos: PAN, PRI, PRD, Verde, PT, MC y Morena (También pueden existir partidos locales). En el INE https://www.ine.mx/actores-politicos/partidos-politicos-nacionales/ encontrarás lo básico de cada partido y los links a sus páginas web. ¡Busca su declaración de principios o filosofía institucional! Con esa declaración de principios podrás darte cuenta –al menos teóricamente– qué piensan sobre la propiedad, el trabajo, la vida, los derechos humanos, las libertades, la justicia, la defensa de los vulnerables, la democracia, el desarrollo económico, etc. Te aconsejo que NO le entres con prejuicios y estereotipos como “ese partido es de izquierda o de derecha”. Esos términos muchas veces se quedan cortos como categorías válidas de clasificación. Mejor lee tal declaración de principios y busca con cuál te identificas más. Este punto 2 te ayudará en los puntos 3 y 4.
- Cuando hay candidatos apoyados por varios partidos que van en coalición o alianza, te aparecerá ese candidato tantas veces como partidos lo apoyen, tal como aparece en la imagen lateral (pongo sólo el ejemplo de candidatos a la presidencia de la República).
Mi sugerencia es que sólo taches una casilla, la del partido que más te atrajo de acuerdo a tu preferencia. Eso, en el caso de diputados y senadores, le contará a ese partido para la elección de 200 diputados y 32 senadores “plurinominales” o de representación proporcional, y fortalecerás indirectamente a ese partido. Lo mismo ocurre con los diputados locales: votar por un partido le proporcionará una cantidad adicional de diputados plurinominales.
- No anules tu voto. Te explico: todos los votos forman un denominador y los votos a cada candidato su respectivo numerador. Si anulas un voto el efecto es que se reduce el denominador y la relación “num/den” aumenta. Imagina lo siguiente: de 100 votos, 37 son para partido X; 44 para partido Y; 10 para partido Z, y hay 9 votos anulados. El denominador será el de votos válidos, a saber: 91. Los plurinominales se tomarán de los votos válidos, así, anulando tu voto el efecto es que tendrá más fuerza proporcional el primer lugar… **Los votos se anulan si dejas la boleta en blanco, o si tachas varias casillas que no están en coalición, o cuando tachas la boleta entera, o cuando escribes recaditos, quejas, etc. Aquí te doy dos tips: 1) vota por el mejor de los candidatos aunque no te convenza del todo; y si para ti nadie es el mejor, entonces vota por el menos malo; o incluso, en el utópico caso de que todos te parezcan igualmente malos, pues piensa en el partido con que más te identifiques y dale tu voto; 2) vota por la segunda fuerza política con el fin de hacer contrapesos reales y evitar mayorías abrumadoras… en otra columna te hablé del peligro de la tiranía. Regresemos al ejemplo: si esos 9 votos nulos se hubieran dado al candidato de partido “X”, que era el segundo lugar en las encuestas, no sólo hubiera ganado, sino también fortaleceríamos –en el caso de las boletas para el Congreso– la proporción de legisladores de ese partido. ¡No tires a la basura un voto que puede hacer la diferencia!
- Vivimos en la era de “bots” que alteran las encuestas digitales y en la época de mandar a hacer “con los cuates” encuestas a modo que dicen que tal candidato va en primerísimo lugar. Ante este panorama, te doy algunos tips: 1) revisa en el pasado cuáles casas encuestadoras han sido serias y certeras respecto a los resultados y entonces dales más peso que a otras que son encuestadoras nuevas o desconocidas (muchas veces son fake polls); 2) no te vayas con la finta de que las tendencias de las encuestas son irreversibles, pues eso te hace sentir que tu voto es irrelevante. Esa estrategia es usada muchas veces para desalentar el voto y que se dé el efecto de “profecía autocumplida”, es decir, que al no acudir a votar los potenciales opositores por desánimo, efectivamente, se consume una abrumadora mayoría que había sido “predicha” por el oráculo de las encuestadoras que precisamente desanimaban el voto opositor; 3) recuerda algo: ¡la verdadera encuesta es la que ocurre el día de la elección!
- El emperador Julio César hizo célebre una idea que ya existía entre los griegos: dividir como estrategia para vencer. El adagio latino dice así: “divide et impera” (pronunciado: dívide et ímpera). ¿Qué pensar de los partidos “resta votos”? ¡Yo no los soporto!, porque son puestos por el gobierno en turno para atraer a aquellos desencantados de su gobierno, pero que sería peligroso que se fueran con la oposición real. A mí me encantaría tener una democracia a la francesa, con segunda vuelta, donde queden los dos candidatos más votados; esas democracias han comprendido que así evitan la pulverización del voto en muchos partidos. Pero en México sí pueden llegar a la votación final varios candidatos. ¿Qué hacer entonces? Doy dos tips: 1) si ves las encuestas y el tercer o cuarto candidato son realmente buenos, te convencen; si ves la plataforma de su partido y es conveniente; entonces vota por ellos, pues aunque ahora no ganen, poco a poco se irá fortaleciendo dicha opción y, tal vez, al paso de los años, sea la segunda o incluso primera fuerza y alcance el poder. Esa ha sido la historia de muchos partidos buenos en distintos países; 2) si ves la historia del candidato y no es tan buena que digamos, o que su partido es movedizo y hace alianzas a conveniencia, ahora con unos, mañana con otros, o que es un candidato que está de “lame botas” y “palero” del candidato que va en primer lugar en las encuestas, entonces, querido amigo, te quieren ver la cara, es un candidato “resta votos”, mándalo a… Por más buena mercadotecnia que tenga, no le des tu voto a esas opciones que sólo dividen.
- Influye en tu familia y grupo de amigos para que ellos, a su vez, se informen, conozcan, ponderen, y realicen un voto responsable y razonado. Comparte ideas, escucha otras opiniones, combate prejuicios, aporta espíritu crítico y respeta las diferencias legítimas. Sé un buen demócrata.
8. Ve a votar el día de la elección. Te gustará la experiencia. Cuando se hace con responsabilidad, cuando te has informado y lo has hecho bien, votar te hace sentir creador del futuro de tu país, y eso da mucho orgullo. Si puedes incluso apoyar en la casilla, te animo a hacerlo. Si llegas muy temprano a votar este 2 de junio, y falta algún funcionario de casilla, preguntarán en la fila quién quiere tomar su lugar (alguna vez fui presidente de casilla y la verdad, aunque es cansado, me sentí muy satisfecho y contento, además de que aprendí muchísimo).