Los medios de comunicación históricamente son una herramienta fundamental para la construcción y transmisión de cultura; es así que los medios tradicionales y digitales han moldeado narrativas que reflejan, refuerzan y, en ocasiones desafían las estructuras sociales.
En este contexto, los estudios culturales han surgido como una disciplina que analiza la relación entre comunicación, poder y sociedad, poniendo mucho énfasis en los significados que se crean y difunden a través de los distintos canales mediáticos.
El término “narrativas” es cada vez más común entre especialistas y entusiastas de los medios, ya que se refiere a las formas en que se construyen y presentan historias en el ámbito audiovisual, digital y escrito. Los estudios culturales exploran el impacto de estas narrativas en una audiencia que, en muchos casos, consume contenidos sin un análisis crítico. Esto resulta clave en una era donde las redes sociales, el cine, la televisión y las plataformas digitales moldean nuestra percepción del mundo y de las diversas realidades sociales.
La cultura no es estática ni neutral; se expresa a través de los medios y está influenciada por ideologías, intereses económicos y dinámicas de poder. Las representaciones mediáticas no solo comunican información, sino que también legitiman o cuestionan valores, creencias y normas dentro de una sociedad. En este proceso, la comunicación actúa como un puente para compartir significados, reforzar identidades y generar interacciones que trascienden diferencias de clase social, edad, género, creencias o posturas políticas.
Además, la relación entre cultura y poder es fundamental en este análisis. Las expresiones mediáticas no solo reflejan la sociedad, sino que también participan activamente en la construcción de significados que determinan cómo los individuos se perciben a sí mismos y a los demás. Los estudios culturales buscan entender estas dinámicas, viendo los medios como espacios donde se negocian creencias, tradiciones y costumbres, en lugar de asumirlos como meros canales de entretenimiento o información.
En última instancia, comprender los medios desde la perspectiva de los estudios culturales permite analizar críticamente cómo las narrativas influyen en la manera en que interpretamos la realidad. Esto abre la puerta a reflexionar sobre la necesidad de una ciudadanía más consciente y crítica ante el consumo de información y el impacto que este tiene en la sociedad.