UPAEP vive sus III Jornadas de Teología, en donde el eje rector es la diversidad de los discursos teológicos.
El hombre siempre tiende a buscar la verdad, uno de los medios más apropiados de la educación, el acercamiento entre la fe y la ciencia, de ahí la responsabilidad de la teología en la universitas. Esto es parte de lo analizado durante el primer día de trabajo de las III Jornadas de Teología realizadas por la UPAEP.
Durante la bienvenida a este evento, el Dr. Mathias Nebel, Director del Instituto Promotor del Bien Común, destacó que este evento representa la oportunidad de la universidad como un momento de encuentro para analizar el papel de la teología dentro de diferentes aspectos de la vida.
En su intervención el Dr. Presb. Roberto Funes Ugarte, señaló que antes del cristianismo, había tres formas de hacer teología en el mundo grecorromano, la mítica, esta se llevaba acabo principalmente a través de los poetas y los cultos culturales; la política, que estaba de la mano de la conducción de las ciudades por parte de los emperadores y los jefes; esta tenía una dimensión ética de actuación, pero sobre todo estaba impulsada por el estímulo de la superstición y filosófica, propia de los grandes pensadores y que se interrogaba específicamente por la cercana de Dios por el mundo, es justo ante esta que el cristianismo debe de dar respuesta.
Destacó que el cristianismo es una religión histórica y por lo tanto rechaza la teología mítica que ocurre lejos de aquellos que la practican, ya que presenta a Dios como alguien cercano a su pueblo con quien ha hecho una alianza y luego se hizo carne para mostrar su propio rostro en Jesucristo. Asume el papel de la teología política para que el Estado tenga principios éticos conforme a los principios de la fe y aborda la tarea de la teología filosófica para responder a los grandes pensadores.
“La respuesta del cristianismo ante el mundo grecorromano es Dios está cerca de nosotros, no es un Dios mítico ajeno. Dios es el Dios de la vida que va a acercarse a nosotros en la persona de Jesucristo”, puntualizó.
Por su parte, el Dr. Presb. Mario Ángel Flores Ramos, Rector de la Universidad Pontificia de México, durante su ponencia titulada “La reflexión teológica patrística: ¿cómo, qué y para quienes?”, expresó que a los Padres de la Iglesia se les puede considerar como los testigos cualificados y privilegiados de la predicación apostólica, su principal característica es la de ser los que nos unen entre la revelación y la tradición.
Reconoció que la vida cristiana no solamente es enseñanza, sino que también es testimonio, “no solamente construimos la vida cristiana a través de reflexiones sino sobre todo a través de la santidad”.
“Las cuestiones que nos impone la realidad en cualquier momento de la historia a nivel personal o social, deben ser comprendidas desde la reflexión creyente a partir de la palabra de Dios: Teología”, indicó.
En el desarrollo de esta jornada de trabajo, también se vivió una mesa redonda con fundadores de la universidad quienes respondieron a la interrogante de ¿por qué crear una universidad católica y qué es lo que hace que una universidad sea católica?
En dicha mesa redonda de voz del Mtro. José Antonio Arrubarrena Aragó, el Ing. José Antonio Quintana Fdez. y Mons. Eugenio Lira Rugarcía, Obispo de la Diócesis de Matamoros, quienes destacaron el papel y acompañamiento que la Iglesia ha tenido a lo largo del desarrollo y crecimiento de la institución.