La quinta sesión de la VI Cumbre Iberoamericana de la Familia enfatizó en la importancia de crear redes de apoyo entre la familia y la escuela para abordar los desafíos educativos actuales y reconstruir el tejido social.
Generar redes de apoyo frente a las necesidades educativas actuales fue la temática central de la quinta sesión de la VI Cumbre Iberoamericana de la Familia celebrada en las instalaciones del Centro de Vinculación de la UPAEP.
Bajo esta primicia, el Dr. Jorge Medina Delgadillo, Director General de Innovación en Modalidades Educativas, señaló que ningún actor social puede por sí solo hacer frente a los desafíos educativos que hoy se presentan, de ahí la necesidad de generar redes interinstitucionales.
Pero para lograrlo –dijo- es primordial que familia y escuela trabajen de manera conjunta respetando la incondicionalidad de la primera y la alteridad de la segunda.
Para lograr esto es fundamental entender que es en la familia en donde se aprende el amor incondicional; ser amado sin más, porque sí “y eso o lo da la familia o no lo da nadie”. El problema surge cuando el papá o la mamá empiezan a condicionar al hijo, generando que el ambiente dentro del hogar sea como de un trabajo; “entonces el hijo aprende no a tener una mamá sino una jefa, no un padre sino un capataz; y empieza una relación tiránica”. Entonces la familia empieza a adoptar funciones de otras instituciones y dejar de aportar su función única social”.
Mientras que en la escuela se encuentra la alteridad, lo que da un gran aporte para la salud psíquica y social. “El encuentro pide dos, debe haber alteridad; es otro que yo y una institución que te enseña a ceder, dialogar, ser empático, todas las habilidades de alteridad es la escuela”.
De ahí que puntualizó que es necesario desescolarizar la familia, que la familia sea la familia y la escuela sea la escuela, debemos defender las autonomías y fortalecer las áreas en común: la fragua del carácter y el desarrollo del proyecto de vida.
“Se debe trabajar en redes interinstitucionales para lograr frutos en la reconstrucción del tejido social”, sostuvo el Director General de Innovación en Modalidades Educativas
Por ello, el Dr. Medina Delgadillo reiteró que no se debe continuar con más asepsia social; “la educación o se encarna en el aquí o ahora o no deja de ser una cosa nostica, abstracta, genérica; o el alumno se habilita para transformar la vida de su entorno o aún nos falta tarea a todos, alumnos y profesores”.
Esta construcción de redes es prioritaria para la reconstrucción social y para ello se requieren convocantes y a al parecer del ponente, la universidad sigue siendo una de esas instituciones convocantes en donde todos se puedan sentar a dialogar, en donde se pueden generar auténticas condiciones de diálogo de alteridad. “Las universidades no pueden perder esta oportunidad, por tanto, debemos pasar de la ceguera de taller a una apertura de voltear y hacer redes y en las redes salvarnos”.