¿Cuáles son los Principales Retos de la Cumbre Anual del G-20?
23/11/2022
Autor: Dr. Juan Carlos Botello
Cargo: Profesor Facultad de Comercio Internacional y Logística

El martes 15 de noviembre del presente año comenzó la Cumbre del G-20 en Bali, Indonesia, en medio de enormes complicaciones mundiales. El G-20 tiene como propósito fundamental la discusión de diversos temas políticos y económicos a nivel mundial. Dentro de los temas económicos se encuentran los relacionados con la inversión pública en infraestructura, destacando que esta acción es más efectiva que cualquier otro gasto público. Sin embargo, se sabe que los países emergentes son los que cuentan con menos recursos para invertir en infraestructura sostenible, lo cual puede conducir al incumplimiento de objetivos relacionados con el cambio climático. De la misma manera, el G20 reporta que si los países dan un giro para incorporar más energías limpias para el 2030, podrían contribuir al crecimiento del producto interno bruto global del 4%; por el contrario, el mundo podría perder hasta un 10% del producto interno bruto global para mediados del siglo 21 si es que no se cumplen los acuerdos de París, y las consecuencias podrían ser mayores aún para los países en vías de desarrollo, ya que podrían perder más de un 25% de su producto interno bruto.

El reto es enorme, ya que el objetivo es reducir o eliminar la brecha existente en el desarrollo e incorporación de infraestructura sostenible a nivel mundial, por lo que la participación de la inversión privada es fundamental para cumplir con dichos objetivos. Por otro lado, el tema de la inseguridad alimentaria fue altamente abordado, ya que ésta se agravó tras la pandemia y el cambio climático principalmente en grupos vulnerables; lo cual afecta los esfuerzos realizados para la reducción de la pobreza en el mundo. El reto más importante para este rubro es aumentar a mediano y largo plazo la capacidad y productividad agrícola sostenible, mantener el comercio justo y aumentar la disponibilidad de fertilizantes. De manera preocupante también se manifiesta el problema de la salud a nivel global derivado de la COVID-19. La inesperada pandemia afectó la infraestructura sanitaria, así como los programas de salud pública en el mundo, y los grupos de trabajo del G-20 se encuentran trabajando para buscar y canalizar ayuda financiera para fortalecer este sector. Con relación a estos tres grandes temas, la pregunta que me hago es ¿qué está haciendo México para atender estos grandes retos? Pues al parecer la respuesta, al menos por el momento, la desconozco, ya que en los últimos cuatro años lo único que percibimos por parte del gobierno federal es la inacción. 

Muy importante destacar que ésta cumbre se llevó a cabo bajo las presiones internacionales derivadas de la invasión rusa a Ucrania, el resurgimiento de los gobiernos totalitarios, la rivalidad entre Estados Unidos y China y las tensiones de un conflicto armado de orden mundial (este último por la sospecha – a pesar de las aclaraciones pertinentes- de la caída de misiles en territorio polaco, miembro de la OTAN), es decir, las tensiones geopolíticas a nivel internacional continúan y no cesarán, a menos que haya acuerdos comunes de carácter global. Por si esto no fuese suficiente, la recesión económica que está por venir agrava los enormes retos discutidos en la cumbre del G-20 y preocupa de manera inmediata la carestía de los alimentos, y es urgente que se busquen los mecanismos necesarios para bajar el alto costo de los commodities.  Al parecer, este cierre de año no se ve muy alentador, pero espero que el próximo año podamos avanzar como sociedad global.