Una de las grandes preocupaciones a nivel mundial es la contaminación, sobre todo la contaminación derivada de los plásticos ya que cada vez vemos más montones de residuos plásticos en todos lados. Entonces, ¿deberían desaparecer los plásticos?
A pesar de las ideas erróneas y la mala fama que se les ha hecho a los plásticos, déjenme decirles que éstos han logrado que nuestra vida sea más fácil, más cómoda y, por imposible que parezca, están contribuyendo a reducir la contaminación ambiental. Si miramos a nuestro alrededor vamos a ver que la mayoría de las cosas que tenemos a nuestro alcance están hechas de plástico. Éstos son materiales ligeros, tienen excelente resistencia química, física y mecánica (inclusive algunos son más resistentes que el vidrio o los metales). Y, su principal beneficio es que el 90% de ellos son reciclables.
El principal problema con los plásticos es que desconocemos qué podemos hacer con ellos una vez que termina su vida útil y lo más fácil es tirarlos a la basura. El tema del reciclaje no es nuevo y aunque se pudiera pensar que ya vivimos en una cultura del reciclado, esto no es completamente cierto. Hoy en día sólo reciclamos entre el 6 y 8% del total de los plásticos, a pesar de que la mayoría de éstos son 100% reciclables y los podemos volver a transformar.
Como usuarios, ¿cómo podemos mejorar el panorama? Primero, necesitamos ser más responsables y conscientes sobre el uso de éstos; por ejemplo, separarlos de manera más eficiente. Para ello existe una clasificación a nivel mundial que nos permite identificarlos muy fácilmente. En la parte inferior de la mayoría de los artículos de plástico podemos ver un triángulo con un número en su interior; cada número indica el tipo de plástico del que está hecha la pieza. Así, los principales plásticos se clasifican de la siguiente manera: 1 - PET (polietilen tereftalato), 2 - HDPE (polietileno de alta densidad), 3 - PVC (policloruro de vinilo), 4 - LDPE (polietileno de baja densidad), 5 - PP (polipropileno), 6 - PS (poliestireno) y 7 - Otros (todos los plásticos que tienen características diferentes a los 6 primeros).
El reciclado no es la única solución que tenemos. Hoy en día, la Ingeniería Química está realizando estudios e investigaciones para fabricar plásticos que no dependan del petróleo y que no sean contaminantes, ya se están fabricando plásticos hechos a base de plantas en donde el tiempo de degradación es de 3 a 5 años y al final estos se convierten en composta y se utiliza como fertilizante para las plantas. De igual manera se están buscando alternativas para recuperar los plásticos vertidos en basureros y rellenos sanitarios para despolimerizarlos y volverlos a transformar.
Finalmente, todos somos parte del problema, pero también podemos ser parte de la solución. ¿Cómo puedo YO contribuir para evitar esta contaminación?, siendo usuarios responsables. Es decir, 1. Reduciendo el uso de plásticos, 2. Separando los plásticos por su clasificación, 3. Llevándolos a los centros de acopio y 4. Utilizando artículos hechos con bioplásticos.