Nutrición y fertilidad
07/03/2024
Autor: Dariana Zapién Rosas
Programa Académico: Estudiante de Nutrición

La relación entre nutrición y fertilidad es un tema de creciente interés y relevancia en la sociedad. La infertilidad, definida como la incapacidad de concebir un embarazo después de un año de relaciones sexuales sin medidas anticonceptivas, puede estar influenciada por una serie de factores, entre ellos, la composición corporal y la ingesta de nutrientes.

Diversos estudios han demostrado que el estilo de vida, incluyendo la dieta y la actividad física, desempeña un papel crucial en la capacidad reproductiva tanto de hombres como de mujeres. La obesidad, el sedentarismo y el consumo de sustancias como el tabaco y el alcohol han sido asociados con una disminución en la fertilidad. Por otro lado, una dieta equilibrada rica en nutrientes esenciales puede mejorar las probabilidades de concepción.

La composición corporal, particularmente el peso corporal, ha sido identificada como un factor importante en la fertilidad. Tanto el bajo peso como el sobrepeso u obesidad pueden afectar negativamente la capacidad de concebir. El exceso de tejido adiposo  puede alterar los niveles hormonales y la sensibilidad a la insulina, lo que repercute en la ovulación y la calidad del esperma.

En cuanto a la ingesta de macronutrientes, se ha observado que una dieta con una carga glucémica baja y rica en grasas monoinsaturadas puede mejorar la sensibilidad a la insulina y la calidad del esperma. Asimismo, la suplementación con ácidos grasos omega-3 ha demostrado ser beneficiosa para la fertilidad.

Las vitaminas y minerales también desempeñan un papel fundamental en la fertilidad. El ácido fólico, la vitamina B12, A, D, C y E, así como el calcio, hierro, zinc, selenio y yodo son nutrientes esenciales que contribuyen a la salud reproductiva tanto de hombres como de mujeres.

En resumen, adoptar hábitos de vida saludables que incluyan una alimentación balanceada, y la práctica regular de ejercicio físico pueden ser clave para mejorar la fertilidad. Asimismo, es importante prestar atención a la ingesta de vitaminas y minerales, así como evitar el consumo de sustancias nocivas como el alcohol y el tabaco. Al priorizar la nutrición y el bienestar general, se pueden optimizar las posibilidades de concebir y llevar a término un embarazo saludable.

 

Referencia: González Rodríguez, Liliana Guadalupe, López Sobaler, Ana M., Perea Sánchez, José Miguel, & Ortega, Rosa M.. (2018). Nutrición y fertilidad. Nutrición Hospitalaria, 35(spe6), 7-10. Epub 06 de julio de 2020.https://dx.doi.org/10.20960/nh.2279