^{Estudiantes de Ciencias Médicas y Ciencias de la Salud viven su Ceremonia de Grado, acto solemne que marca el fin de una etapa formativa.}

524 estudiantes de licenciatura, posgrado y especialidad de los decanatos de Ciencias Médicas y Ciencias de la Salud, celebraron el culmen e inicio de una nueva etapa de sus vidas, esto al vivir de manera presencial la Solemne Ceremonia de Grado.

Durante este acto el Dr. Alejandro Javier Ibarra Guajardo, fue el encargado de dirigir la última cátedra a los estudiantes, en la que destacó que el liderazgo que la Universidad ha infundido en sus estudiantes a través de su misión institucional “Crear corrientes de pensamiento y formar líderes que transformen a la sociedad“, lo irán viviendo día a día en el ejercicio de la profesión, con un sentido de servicio, de trabajo honesto y de compromiso social.

Sin este liderazgo no será posible dar frente a lo suscitado por la pandemia, ya que es necesaria una rectoría efectiva y dinámica de los Estados, mediante políticas nacionales que integren políticas de salud, políticas económicas y políticas sociales.

“Ustedes tienen que llevar a cabo ese liderazgo transformador en sus ámbitos de trabajo con pasión y compromiso, tratando de poner en práctica todo lo aprendido estos años, experiencia inolvidable, recordando todo ese cúmulo de enseñanzas de sus profesores, donde se va aquilatando esta vocación y decisión importante de haber elegido cada quien su profesión”, indicó.

Y continuó, “no es el final del camino, es el inicio de una gran aventura y es su deber llevar cada enseñanza en el corazón y ponerlas en práctica especialmente aquellas, que no se enseñan en los libros sino con la experiencia, experiencias que se van dando en el ejercicio de la profesión, en nuestros casos todos los que tenemos la fortuna y el privilegio de tratar con la salud de nuestros semejantes”.

Exhortó a los graduados a ser buenos profesionistas, buenas personas y no olvidar los valores que han aprendido en esta institución. “Duc in Altum, Crear corrientes de pensamiento y formar líderes que transformen a la sociedad, en la búsqueda de la verdad, integrando fe, ciencia y vida”; “ojalá hayamos podido marcar (como un tatuaje) nuestra filosofía institucional para el resto de su vida y ejercicio profesional”.

Además, los invitó a que vivan sus sueños, que nada los detenga, busquen soluciones a los retos y si necesitan ayuda no olviden a su familia y a sus amigos. “No tengan miedo y nunca dejen de soñar, no tienen que ser buenos para empezar, pero tienen que empezar para llegar a ser buenos”.

Por su parte, Carlos Alberto Lozano Campos, del programa académico de Odontología, realizó un contexto sobre el otorgamiento del Grado Académico. En el siglo XII surgieron las primeras universidades, las cuales fungían como instrumento para educar a los alumnos en los más altos conocimientos de la época. En determinado momento, al tener el entendimiento necesario y cumplir con exámenes conducidos por sus docentes, obtenían el “Gradus”, palabra en latín cuyo significado era “paso”, haciendo alusión al cumplimiento de un paso más en el camino para convertirse en un maestro.

“El mundo donde vivimos propone un horizonte donde se divisan una enorme cantidad de desafíos, ya no es de la manera en la cual era antes, ha habido un sinfín de cambios a los cuales nos hemos tenido que adaptar en poco tiempo, sin embargo, no todo es desalentador. (...). Los desafíos aluden a nuestra capacidad de buscar alternativas y soluciones, refinan nuestro aprendizaje y hacen surgir ese liderazgo transformador característico de cada miembro de esta comunidad universitaria”, mencionó.

En este marco del mensaje, quiso dejar dos consejos a sus compañeros: uno como odontólogo, “a pesar de las circunstancias nunca dejen de sonreír”, y como compañero, “ya tenemos las alas de triunfo, sólo necesitamos emprender el vuelo”.