^{El Grupo Guadalupano UPAEP celebra su 40 aniversario con una consagración institucional a la Virgen de Guadalupe y entrega premios en su tradicional rifa.}

Este 8 de diciembre, UPAEP celebró su Consagración Institucional a la Virgen de Guadalupe en el marco del 40 aniversario de la formación del Grupo Guadalupano. Durante la ceremonia eucarística que se llevó a cabo en la Capilla Universitaria, el Dr. Emilio José Baños Ardavín, encomendó al Señor Jesucristo, Rey del universo, el trabajo de la Universidad. Se entregaron a la divina majestad de Cristo "sus errores y logros, sus carencias y proyectos, sus retos y debilidades".

El mensaje central recuerda las palabras de María: "¿No estoy yo aquí, que soy tu madre. ¿No estás bajo mi sombra? ¿No soy yo tu salud? ¿No estás por ventura en mi regazo?".

Compromiso Institucional y Espiritual

Como respuesta a este mensaje, la comunidad se consagró también al Inmaculado Corazón de María. Los miembros del grupo y la Comunidad Universitaria reiteraron humildemente la frase utilizada por San Juan Pablo II: "Totus tuus, María, ego sum, et omnia me a tu asunt" (Soy todo tuyo, María, y todo lo mío es tuyo).

Cabe resaltar que año con año, en estas fechas, la Universidad se ofrece como instrumento para la evangelización de la cultura y para la construcción de la civilización, la justicia y la paz.

El Mensaje Guadalupano y la Devoción Familiar

Durante su homilía, el Padre José Manuel Denetro LC., reflexionó sobre el profundo significado de la Virgen de Guadalupe como madre de todos los mexicanos. Recordó las palabras que aparecen en el ayate de la Villa: "Hijito mío, Juan Dieguito, ¿qué te preocupa? ¿Qué has de menester? ¿No estás acaso bajo mi regazo? ¿No soy yo tu madre?" El sacerdote subrayó que los mexicanos tienen el privilegio de tener cerca este santuario mariano, narrando su propia experiencia de peregrinar a la Villa como hijo, no como turista, antes de visitar otros santuarios marianos en España. Compartió también una anécdota reveladora: un sacerdote de la Basílica explicó que cuando las arcas de limosnas se llenan más rápido, es señal de que vienen tiempos difíciles, pues más personas acuden a la Virgen con sus necesidades.

El padre habló sobre la devoción que debe transmitirse cuando se visita la Basílica, destacando tres espacios importantes: la villa actual, el templo expiatorio del centro donde siempre está expuesta la Eucaristía por la conversión de los pecados, y la capilla de los capuchinos, dedicada a la Sagrada Familia. En esta última capilla se encuentran medallones de la Virgen María, San José, el Niño Jesús, San Joaquín y Santa Ana. El Padre José Manuel invitó a los fieles a visitar este templo para rezar por la familia, definiendo a la familia de manera amplia: "Quien vive bajo tu mismo techo", incluyendo a todos los que comparten el hogar, recordando que la comida es una bendición que debe compartirse con todos por igual.

Finalmente, el padre reflexionó sobre el mensaje de la Inmaculada Concepción, recordando que en las apariciones de Lourdes, la Virgen se identificó con este nombre poco después de que fuera proclamado como dogma. Explicó que este título encierra un doble mensaje: amar mucho a Dios y amarlo tanto que no queramos ofenderle. La Virgen María, aunque nació sin pecado original, tuvo libertad y conscientemente eligió no ofender a Dios. El sacerdote invitó a los fieles a imitar este ejemplo diciendo "por hoy no voy a pecar", cultivando el hábito de amar tanto a Dios que no se le quiera ofender. Concluyó exhortando a las familias a confesarse antes de Navidad para que Cristo nazca, crezca y reine verdaderamente en los hogares.

Homenaje a los Pioneros del Grupo Guadalupano

Durante la tradicional tamaliza, se realizó un sentido reconocimiento a los fundadores del Grupo Guadalupano: el Arquitecto Jorge Jiménez Zárate, el señor Abraham Monterrey Hernández y el señor Olegario Mandujano Prado. Estos reconocimientos, aunque simbólicos, fueron entregados por miembros actuales y apreciados por toda la comunidad universitaria.

El presidente del Grupo Guadalupano, Carlos Fuentes Hernández, agradeció a los fundadores por "empezar este camino" y a los colaboradores que "cada año compren su boleto y nos ayuden a seguir adelante".

Resultados de la Rifa Anual

El evento conmemorativo culminó con la esperada Rifa Guadalupana, la dinámica de selección de ganadores se realizó en orden descendiente.

Los premios en efectivo se distribuyeron de la siguiente manera: los puestos décimo al cuarto recibieron 1,000 pesos cada uno. El tercer lugar fue premiado con 3,000 pesos, el segundo lugar obtuvo 4,000 pesos, y el primer premio mayor fue de 5,000 pesos.

Este 40 aniversario confirma la permanencia de la devoción guadalupana, la cual se adoptó en la institución desde sus inicios, con la misión de construir el reino de Jesucristo a través de la verdad y el amor.