El Instituto Promotor del Bien Común estuvo presente en el pasado coloquio científico “Generar calidad académica” de la Universidad de Arkansas State University Campus Colón Querétaro, para dialogar sobre los resultados de la línea de investigación calidad educativa y funcionamiento institucional de IES.
Dicha investigación surge para conocer cómo se genera el bien común en las universidades, de este modo la investigación evalúa distintos factores como: la relación educativa entre docentes - alumnos, la integración de nuevos conocimientos y el modelo educativo. Esto propone que la educación de calidad sea vista como un bien común, recordando que un bien común se asienta en las “relaciones recíprocas” por medio de las cuales “los seres humanos consiguen su bienestar”. (Cahill)
La investigación se enfoca en la relación entre los actores de la institución, esto implica observar la interacción de los miembros para ver cómo se produce y qué beneficios ofrece ese bien. Si bien Michael J. Sandel en 2020 publicó un libro llamado “La Tirania del Merit”, donde afirma que lo que uno logra como persona es en realidad producto de algo más que el esfuerzo individual. Ese “algo más” es precisamente lo común. El filósofo sostiene que “estamos en deuda en diversos sentidos con la comunidad que posibilita nuestro éxito y, por consiguiente, obligados a contribuir a su bien común”.
Menciona Pedro Flores Crespo, profesor e investigador del IPBC que los procesos, relaciones e “interacciones institucionalizadas” son tres dimensiones que podemos al menos utilizar para analizar a la educación como bien común. Con base en esto, se puede construir una métrica alternativa de la calidad educativa al investigar cómo son esas “relaciones recíprocas” entre los distintos miembros de una comunidad escolar o universitaria.
Éste es precisamente el objetivo de un grupo de investigación formado por académicas y académicos de universidades de Querétaro y Puebla, entre las que se encuentran, la Universidad Tecnológica (UTEQ), la de San Juan del Río (UTSJR), la Autónoma (UAQ), Arkanzas State, Anáhuac y el Instituto Promotor del Bien Común de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP). Para crear una métrica del bien común en la universidad, se seleccionaron nueve instituciones de educación superior de los dos estados, se diseñó un modelo basado en cinco dimensiones (agencia humana, estabilidad institucional, gobernanza, justicia y humanidad) y se aplicaron casi cinco mil cuestionarios a muestras representativas de estudiantes, docentes y administrativos.
Luego de realizar un primer análisis, se ha podido constatar que las relaciones en cada una de las nueve universidades están institucionalizadas de manera muy diversa. Se construyen procesos de manera diferenciada y esto puede o no guardar relación con la noción clásica de calidad educativa. Del análisis descriptivo surgen múltiples hipótesis que tendrán que ser discutidas con cada comunidad por si desean emprender sus “transiciones” hacia un enfoque de bien común.