Estos proyectos no solo se enfocan en la innovación tecnológica, sino también en generar un impacto positivo en las zonas que más lo necesitan.
UPAEP impulsa proyectos de gran impacto tecnológico y social a través de su Facultad de Ingeniería Ambiental y Desarrollo Sustentable, donde se están desarrollando iniciativas pioneras como los proyectos agrovoltaicos y las microrredes inteligentes. Juan Francisco Méndez Díaz, profesor de esta facultad, y las estudiantes de maestría María José García Pozos y Blanca Rosario Guevara están liderando estos esfuerzos que buscan mejorar la calidad de vida en comunidades rurales, promoviendo la sostenibilidad y la autosuficiencia energética.
Méndez Díaz destacó que desde el primer periodo de la maestría, las alumnas ya están involucradas en proyectos clave que abordan problemas actuales en las áreas de energía y sustentabilidad. "Ambos proyectos, agrovoltaicos y microrredes inteligentes, tienen como objetivo ayudar a las comunidades a ser más sostenibles y menos contaminantes", explicó el académico.
Estos proyectos no solo se enfocan en la innovación tecnológica, sino también en generar un impacto positivo en las zonas que más lo necesitan.
María José García Pozos, estudiante de la Maestría en Ingeniería Ambiental y Desarrollo Sustentable de UPAEP, presentó el concepto de agrovoltaicos, que combina la generación de energía limpia con la producción de alimentos bajo paneles solares. "El sistema agrovoltaico permite generar energía solar mientras cultivas plantas bajo los paneles, aprovechando el hecho de que algunas especies vegetales pueden beneficiarse de la sombra y calor que estos proporcionan", explicó.
El proyecto se basa en estudios realizados en Alemania desde la década de 1980, que demostraron que ciertas plantas pueden crecer de manera óptima bajo paneles solares. Al protegerlas del estrés térmico y reducir su necesidad de agua, los cultivos pueden florecer de manera más eficiente y con menos recursos. "Esto tiene un gran potencial en comunidades rurales, donde se puede garantizar tanto la energía limpia como la producción de alimentos de manera sostenible", añadió García Pozos.
Actualmente, el proyecto está experimentando con cultivos de papa y lechuga, buscando mejorar tanto la velocidad de crecimiento como la calidad nutricional de estos productos bajo condiciones controladas.
Por su parte, Blanca Rosario Guevara, estudiante de la Maestría en Gestión de la Energía de UPAEP, está trabajando en el desarrollo de microrredes inteligentes que permiten a las comunidades rurales generar y gestionar su propia energía sin depender de las grandes redes eléctricas. "El proyecto busca suministrar energía a lugares alejados, como escuelas u hospitales, de manera independiente y eficiente, combinando energías renovables y convencionales", explicó Guevara.
Las microrredes no solo ofrecen energía, sino que también permiten la gestión inteligente de la misma, adaptándose a las demandas específicas de cada comunidad. "Esto es clave para garantizar un suministro constante y confiable en áreas donde el acceso a la electricidad es limitado", añadió. Aunque el proyecto está en una fase inicial, el equipo espera que sea una solución viable para muchas zonas rurales del país.
Juan Francisco Méndez subrayó que ambos proyectos tienen el potencial de revolucionar las zonas rurales de México al ofrecer soluciones tecnológicas que, además de ser sostenibles, son accesibles. "Lo que buscamos es solucionar tanto el problema energético como el de la producción de alimentos de manera limpia y eficiente", afirmó.
Estos proyectos no solo se destacan por su innovación, sino también por su enfoque en la mejora de la calidad de vida de las comunidades. A medida que avanzan en su desarrollo, prometen ser un modelo a seguir en la búsqueda de soluciones sustentables para los desafíos globales.
La UPAEP, a través de iniciativas como éstas, reafirma su compromiso con la investigación y el desarrollo de tecnologías que promuevan el bienestar de las comunidades más vulnerables, demostrando que la ciencia y la tecnología pueden ser motores de cambio social.