^{“No solamente es exclusivo del primer nivel, nos corresponde a todos los que trabajamos en el área de la salud”, expresó la Mtra. María Hernández.}

La conferencia, “Intervenciones para el control de Heridas y Accesos Vasculares”, impartida por la Mtra. María Coral Hernández Bravo, Jefa de Enfermeras del CESSA Teziutlán, inauguró el Segundo Encuentro Internacional de Enfermería UPAEP, titulado “Enfermería: Ciencia y Arte del Cuidado”.

Hernández Bravo enfatizó que la atención primaria a la salud (APS) debe ser integral e integrada, pues los profesionales de la salud no sólo tienen que considerar todas las esferas del paciente, física, mental y espiritual; sino que deben dar un seguimiento al tratamiento en todos los niveles.

“Tenemos que fijarnos en el entorno en el que vive el paciente, y que no solamente es exclusivo del primer nivel, nos corresponde a todos los que trabajamos en el área de la salud”, denunció.

La Mtra. María explicó que, según la NOM-019-SSA3-2013, hay tres intervenciones importantes para el actuar de enfermería: independientes, dependientes, interdependientes, todas ellas centradas en las respuestas humanas y el trabajo en equipo multidisciplinario.

Añadió que estas intervenciones tienen el objetivo de lograr la recuperación, seguridad y bienestar del paciente, y animó a los presentes a ser responsables en el ejercicio de su profesión, “tiene que ver con los conocimientos que nosotros tenemos y con el pensamiento crítico”.

Asimismo, expresó que estas intervenciones deben tener un enfoque en la APS, que tome en cuenta  la promoción, la prevención, el tratamiento, la rehabilitación, los cuidados paliativos y el entorno cotidiano.

Se refirió a la Conferencia Internacional de Alma-Ata en 1978, y comentó que a partir de este hito muchas otras conferencias han dado su definición de la APS. Como ejemplo, aludió a la Declaración de Astana del 2018, en la que se retomó el concepto de la APS, y se consideró como la piedra angular de los servicios de salud.

La profesional de la salud también comentó que la OMS hizo un llamado a México con el “Pacto 30.30.30 APS para la Salud Universal”, que se celebró en 2019, en la Ciudad de México. Este pacto tiene como objetivo eliminar las barreras de acceso en un 30% como mínimo; requiere aumentar el gasto público en salud al menos a un 6% del PIB, y establece que al menos 30% de estos recursos se deben invertir en el primer nivel de atención. Todo esto para el 2030.

Expuso, además, la importancia de la interacciones integrales e integradas en el área de las heridas y los accesos vasculares; remitió al conocimiento y recursos con los que el personal de enfermería debe contar, como acrónimos, guías prácticas clínicas, normas oficiales, lineamientos y escalas. Subrayó que estas interacciones deben llevarse a cabo bajo los estándares de calidad y las acciones esenciales, “que nos las debemos de saber de memoria”.

La Mtra. detalló el proceso de atención. Primero se hace una valoración, en la que el profesional examina la herida de acuerdo con su clasificación, por etiología, por contaminación, por evolución de la cicatrización o por profundidad. Aludió a la clasificación de diagnósticos NANDA.

Después el personal de enfermería hace una planeación, se estima dónde está el paciente y a dónde tiene que llegar, es en este momento cuando se puede intervenir. Sin embargo, advirtió que la atención tiene que ser personalizada, “las heridas no son una receta de pastel, las heridas tienen que ver con el proceso de cada paciente, y tenemos que ver su nutrición, sus antecedentes patológicos, entre otros factores”.