“La creación y los fenómenos naturales invitan a la humanidad a un constante asombro y reflexión sobre su existencia”, destaca el Baños Ardavín.
En el marco de la Semana de Rectores y durante un diálogo con el comunicador Fernando Canales, el Dr. Emilio José Baños Ardavín, Rector de UPAEP, invitó a una profunda reflexión sobre el origen y evolución del universo, y el papel que ocupa el ser humano en él. Inspirado por el Día de Todos los Santos y el Día de los Fieles Difuntos, Baños resaltó la importancia de repensar las preguntas existenciales que definen la vida humana: “¿De dónde venimos?”, “¿Quiénes somos?” y “¿Hacia dónde vamos?”.
En un contexto donde la naturaleza y la ciencia convergen, Baños destacó la importancia de mantener el asombro por la creación y los fenómenos naturales. Para ilustrar esta maravilla, evocó las palabras de G.K. Chesterton: “Siempre creí que el mundo implicaba magia, luego pensé que quizás implicara un mago”. Esta cita, comentó Baños, nos recuerda la asombrosa naturaleza de la realidad y la posibilidad de un narrador o creador detrás de esta “historia” cósmica.
El Rector también abordó los avances de la ciencia en la comprensión del universo, subrayando la relevancia de la segunda ley de la termodinámica y el concepto de entropía como herramientas que permiten entender la evolución y eventual destino del universo. Para explicar esta idea, comparó el universo con una fogata: así como el carbón necesita un estímulo externo para encenderse y pasa por diversas etapas de energía hasta consumirse por completo, el universo sigue un proceso de desgaste energético, conocido como entropía, que lleva hacia una inevitable “muerte térmica” en miles de millones de años.
Baños Ardavín recordó la historia detrás de la teoría del Big Bang, que fue confirmada accidentalmente por los ingenieros Arno Penzias y Robert Wilson en 1964, cuando detectaron la radiación de fondo cósmico mientras trabajaban con una antena de telecomunicaciones. Este hallazgo les valió el Premio Nobel de Física en 1978 y corroboró la teoría de que el universo comenzó en un punto de densidad infinita y luego se expandió para dar lugar a lo que hoy conocemos.
Con estas reflexiones, Baños Ardavín subrayó que, aunque la humanidad ha avanzado en la comprensión científica del universo, aún existen misterios que escapan al entendimiento humano. Desde la expansión acelerada del cosmos hasta la pregunta de qué había antes del Big Bang, Baños destacó la importancia de mantener una postura humilde y abierta ante los conocimientos actuales. Animó a los presentes a tomarse el tiempo para observar su entorno y maravillarse ante la complejidad de la vida y del universo, recordando que este asombro es esencial para valorar nuestro propósito y lugar en el cosmos.