La estudiante de la licenciatura en Medicina Veterinaria y Zootecnia atendió una clase en modalidad espejo y un seminario en línea con las universidades de Colombia y Costa Rica.
Impulsados por la Dirección General de Internacionalización en colaboración con la academia, estudiantes de distintas áreas de estudio han tenido la oportunidad de conocer la idiosincracia de otros países gracias al contacto con profesores y estudiantes extranjeros a través de las Clases Espejo.
Tal es el caso de Margarita Tecuapetla, estudiante de segundo semestre de la licenciatura en Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UPAEP, quien decidió aprovechar la pandemia y vivir la internacionalización en línea al tomar una Clase Espejo y un seminario virtual con la Universidad Nariño de Colombia y la Universidad de Costa Rica, respectivamente.
Las Clases Espejo, son una iniciativa de la Dirección General de Internacionalización para promover el intercambio académico en línea y consiste en que un profesor de una universidad extranjera comparte sus conocimientos de un determinado tema con estudiantes UPAEP, y un profesor local expone otro tema con los universitarios extranjeros.
Gracias a este programa, Margarita sació su interés por experimentar la internacionalización en medio de la pandemia, y es que debido a la contingencia sanitaria sus planes se arruinaron. Tuvo que regresar de Canadá, donde se encontraba tomando un curso para perfecccionar su inglés para posteriormente iniciar sus estudios de medicina en el país del norte.
No obstante, dado que la COVID-19 paralizó a todo el mundo, la obligó a iniciar sus estudios en México, donde optó por inciar sus estudios en Medicina Veterinaria y Zootecnia, pero sin perder la visión de buscar vivir una experiencia internacional.
Así, su interés y gusto por viajar, y la curiosidad por aprender nuevas cosas fue lo que la motivó a inscribirse en este programa y tomar algunas clases con otra universidad, desde la comodidad de su casa, a pesar de ser alumna de primer semestre.
“Al inicio no sabía realmente qué esperar de estas clases pues sentía cierta presión en cuanto al contenido de las, eran más avanzadas y más específicas”, confesó.
Sin embargo eso no la detuvo para aprender muchas cosas y abrirse ante esta posibilidad que se le presentó, pues quería experimentar una nueva forma de hacer un intercambio académico, y sacarse así, la espínita que le dejó el no poder hacer sus estudios en Canadá.
“Durante esa experiencia sentí la libertad de hacer las cosas por mí misma, aprendí mucho de mis profesores y amistades que hice, también me volví más abierta con las personas y dejé atrás la pena. Definitivamente cambió mucho mi vida porque antes de eso vivía en mi burbuja”, relató.
A pesar de que Margarita tiene muchas ganas de seguir viajando, sabe que por la situación actual, es complicado, así que prefiere procurar su bienestar y evitar el riesgo no solo de ella y su familia, sino de toda población.
Por el momento, asegura, se siente conforme con las clases en línea y hasta cierto grado cómoda, porque ha podido tomar este tipo de oportunidades como las clases-espejo.
Y aunque asegura la internacionalización presencial no tiene comparación con la experiencia en línea, ella prefiere enfocarse en lo positivo que encontró en este formato, y es que dice puede tener las sesiones grabadas para consultarlas posteriormente en caso de dudas.
Le gustó tanto y le pareció tan interesante el poder tomar este tipo de oportunidades para adquirir nuevas experiencias en estos momentos en los que no es posible estar de manera presencial en la escuela y mucho menos en un intercambio presencial, que en hubo una ocasión en que le tocó estar en dos ventanas al mismo tiempo, ya que no quería perderse su clase espejo ni su clase en UPAEP.
“Sí recomiendo esta modalidad de internacionalización porque aprendemos aunque sea un poco de otras culturas y de cierta manera nos ayuda a comenzar a romper estereotipos en cuanto a la perspectiva que tenemos respecto de otros países”, finalizó.