Gracias a una invitación de su directora académica, Andrea Marín obtuvo una experiencia internacional en donde convivió con gente de todo el mundo, adquirió nuevos conocimientos de la realidad global, desarrolló nuevas habilidades y discutió temas relacionados sobre desarrollo sostenible.
Andrea Marín Rovira, estudiante UPAEP de Ingeniería Ambiental, contó su experiencia de participar en el programa “Global Engagement e-Certificate” cuyo punto central es discutir acerca de las prioridades a nivel mundial en base a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), compartiendo experiencias y puntos de vista de cada integrante del programa.
Andrea se enteró de este programa gracias a su directora académica, (así como también por su interés en vivir experiencias internacionales), quien le indicó que el programa consiste en sesiones de diálogo donde se conversa y discute con personas de alrededor del mundo.
Su respuesta inmediata fue afirmativa, debido a que ella vio con buenos ojos la idea de convivir con gente de más de 15 países y el reto que supone que el programa fuera en idioma extranjero.
“[…] Vivimos en un mundo globalizado, prácticamente transparente, en el que lo que importa, meramente, es esta capacidad de la persona para poder desenvolverse con el exterior, con gente de otros países. Eso es lo que se busca”, señaló.
Considera que este programa le otorgó la oportunidad de desarrollar diferentes aspectos a nivel personal, profesional y académico, tales como el poder entablar discusiones que requieren cierto dominio del idioma extranjero, desenvolverse en el ámbito multicultural, desarrollar el pensamiento crítico, trabajar en equipo y el poder adaptarse a una discusión que se esté desarrollando.
Durante el programa, se realizaban diferentes actividades con cierta relevancia como exámenes, investigaciones, comparaciones del país de origen de la persona con uno diferente, lo cual hacía que el programa fuera más dinámico e interesante.
Además, esta clase de actividades permite al estudiante adquirir un entendimiento más amplio del mundo en el que vivimos, gracias a la información que se obtiene al compartir experiencias y puntos de vista en este programa.
Al discutir temas sobre de desarrollo sostenible, se pretendía buscar ideas de cómo mejorar el mundo en el que vivimos, empezando desde el país de origen de la persona. Andrea cree que en varias ocasiones tendemos a solo ver nuestras limitantes como país y nos comparamos con las tecnologías y desarrollo del resto de países, algo en lo que ella discrepa.
“Creemos que estamos en una situación difícil […] por el gran mundo en el que vivimos, sin embargo, al momento de platicar con estas personas te das cuenta de que todos estamos igual. Entonces tenemos oportunidades aun teniendo las dificultades que tengamos […] pero si hay que resaltar que tenemos maneras de salir adelante y que dentro de nuestras limitantes tenemos fortalezas”, resaltó.
Los aprendizajes que Andrea adquirió en este programa los divide en dos grupos. Como parte de su desarrollo personal, cree que el programa la ayudó a tener la confianza de enfrentar las circunstancias que se le presentaron, que en ocasiones implica resolver situaciones complejas. En cuanto a su desarrollo profesional, considera que pudo demostrar sus habilidades y su capacidad adaptativa ante los demás integrantes del programa.
Anteriormente Andrea ha participado en otras experiencias internacionales, pero en esta ocasión el programa se realizó en modalidad virtual. Aun así, considera que de esta manera no deja de ser una experiencia internacional. Asegura que es más conveniente participar desde el hogar y poder ajustar los horarios a tu preferencia.
Además, la posibilidad para entablar conversación y compartir ideas con personas de todo el mundo es más grande, dado que antes en el transcurso del programa se formaban grupos de personas del mismo país, a comparación de esta ocasión donde la convivencia con otros países es más amplia.
Más allá los aprendizajes académicos y profesionales que obtuvo, lo que más disfrutó de su participación del programa fue entablar relación de amistad con personas de países como Hong Kong, Japón, Francia y otros países. Considera que cuando tenga oportunidad de ir a alguno de estos países, tiene un lugar asegurado debido a la red de contactos que ella formó en el programa.
Invitó a los estudiantes UPAEP a aceptar este tipo de experiencia ya que se volvió un requisito en estos días para el desarrollo profesional. Romper las fronteras que tenemos para volvernos más competitivos y enfrentar al mundo exterior.
“Lo padre de las experiencias internacionales es aventarse a ellas, […] porque a uno le supone un reto y es básicamente superar los límites de nosotros mismos y probarnos que si podemos desarrollarnos, […] y tener esta certeza de que para el momento en que dejemos la universidad vamos a tener un plus sobre nuestra competencia.”, finalizó.