Algunos estudios han sugerido que los pacientes que reciben un refuerzo de vacunación tienen un 66% menos de probabilidades de sufrir una infección sintomática con SARS-CoV-2 comparados con los individuos sin refuerzo.
Los 409 casos de gente contagiada de Covid-19 que se registraron el pasado fin de semana, marcan el inicio de la sexta ola en Puebla, expresó Rocío Baños Lara, Investigadora de la Facultad de Medicina y Directora del Centro de Investigación Oncológica Una Nueva Esperanza-UPAEP.
Indicó que son tres años de estar conviviendo con el SARS-CoV-2 en todo el mundo. Agregó que los patrones de los picos epidémicos en México han sido durante el verano e invierno desde el inicio de la epidemia en nuestro país, siendo el más numeroso el –pico- de enero de 2022, es decir, para la 4ª ola. Para agosto del mismo año esta tendencia se perdió ya que la 5ª ola se caracterizó por un número de casos menor que el anterior.
Baños Lara mencionó que de manera general durante cada ola se presentaba un número mayor de casos, con la introducción de las vacunas en el 2021, la mortalidad se redujo del 10 al 1%, perdiendo la vida aquellos individuos con esquemas de vacunación incompletos, sin vacuna o individuos con comorbilidades.
Refirió que los datos de las investigaciones que se han desarrollado en los últimos tres años muestran qué si bien el padecer la enfermedad proporciona hasta el 46% de protección contra una reinfección, la inmunidad proporcionada por un esquema de vacunación ofrece niveles de protección de hasta el 52%.
Comentó que un dato interesante es que quienes reciben la vacuna y tienen inmunidad por la enfermedad, muestran un nivel de protección de hasta el 77%. Sin embargo, se ha mostrado que la inmunidad generada por la infección con el SARS-CoV-2 disminuye de manera importante con el transcurrir del tiempo, pudiendo presentarse infecciones dentro de un rango entre 3 y 6 meses después de la infección.
Manifestó que algunos estudios han sugerido que los pacientes que reciben un refuerzo de vacunación tienen un 66% menos de probabilidades de sufrir una infección sintomática con SARS-CoV-2 comparados con los individuos sin refuerzo.
Asimismo, dijo que al igual que ocurre con la infección natural la protección que la vacuna ofrece se reduce considerablemente a los 6 meses siguientes de la vacunación. Agregó que, como se sabe, las vacunas protegen contra la enfermedad grave, hospitalización y muerte, sin embargo, la protección disminuye paulatinamente con el transcurrir del tiempo, por lo que los refuerzos de vacunación son necesarios, sobre todo en los individuos más vulnerables.
Señaló que las autoridades de salud consiguen constantemente las vacunas destinadas a la población mexicana, recientemente se ofrecieron refuerzos de la vacuna COVID en Puebla para personas mayores de 60 años, menores de 18 y personal de la salud. Desafortunadamente la población no ha acudido al llamado para aplicación del refuerzo con la misma afluencia que para las primeras dosis a principios del 2021, desperdiciando una valiosa oportunidad de incrementar la protección contra el SARS-CoV-2.
Además de cuidarnos al contar con vacuna y refuerzos, es posible cuidar de nosotros y nuestros seres queridos con los métodos físicos que disminuyen la entrada del SARS-CoV-2 o de otros virus respiratorios, esto es usando cubrebocas en espacios cerrados, lavándonos constantemente las manos y usando alcohol gel para mantenerlas libres de contaminantes.
