La participación ciudadana es fundamental para los procesos democráticos de México
07/09/2021
Autor: Juan Méndez

La Facultad de Ciencias Políticas de la UPAEP, cumple 48 años de fundación y ha marcado un parteaguas en la vida política de Puebla y México con sus egresados.

El tema de la ciudadanía se ha convertido en los últimos años dentro de los procesos electorales como un elemento importante en los cambios socio-políticos de México y si revisamos estos procesos desde la década de los años 70´s a la fecha, nos encontramos con un proceso en el cual la ciudadanía ha ido tomando un papel relevante dentro del discurso y dentro de los elementos formales.

En este mes de la patria y ante los últimos acontecimientos que ha vivido la sociedad mexicana, salen a relucir muchos sentimientos encontrados con respecto a esa identidad nacional y de pertenencia a la comunidad, pero también en el sentido de esa trascendencia en el ámbito de las prácticas democráticas.

En la vida política que está viviendo México, se requiere de profesionales de la ciencia política que sean capaces de hacer un diagnóstico de cómo se encuentra el país en el campo político, de realizar planes y proponer alternativas para poder dar paso a los procesos democráticos de calidad que requiere nuestra nación, manifestó Claudia Ramón Pérez, catedrática de la Facultad de Ciencia Política y Gobierno de la UPAEP.

Dijo que es importante desarrollar un programa integral de planes de acción, de consolidar las instituciones para darle estabilidad al país, y poder solucionar los problemas de salud, económicos, de seguridad y desarrollo social de una manera sustentable, es decir, contar con políticas públicas viables, partidos políticos comprometidos con la sociedad y que den respuesta a los problemas locales y globales, con la colaboración de la sociedad.

Manifestó que si se analiza la historia de nuestro país, podemos encontrar que desde que se comienzan a gestar los elementos que darán paso a la independencia de México a principios del siglo XIX, encontramos un elemento importante que es el elemento de igualdad, en donde los habitantes de la Nueva España, no eran iguales, situación que “cala” en el ánimo de los criollos, quienes manifestaban un sentimiento de inconformidad porque había una marcada desigualdad social.

Por un lado, los criollos de esa época estaban buscando la igualdad mediante esa idea de participar en la vida política de ese momento, y ante ello, estaba presente toda esa tradición liberal que había ido permeando desde Francia e Inglaterra, con todos esos pensadores que formaron parte del periodo de la Ilustración francesa que después repercutirán con sus ideas en los Estados Unidos y que tienen que ver con el concepto de pueblo, de que la soberanía reside en el pueblo.

Dijo que ese pensamiento en su sentido liberal clásico de adquisición de derechos y ejercicio de libertades individuales y colectivas, no siempre son un elemento natural a la organización social y política en lo que más adelante sería el territorio nacional de México.

Agregó que en los diferentes pasajes de la historia de independencia de nuestro país, es importante revisar y analizar cómo se va manejando ese concepto de igualdad y participación ciudadana, en donde la gente ya comenzaba a preguntarse cómo alcanzar esa igualdad y encontrar las formas de poder participar en la vida política de la nueva nación.

Ramón Pérez, manifestó que en la historia política de México, hay un formalismo jurídico, un formalismo legal, sin embargo, este no se materializa y no aterriza en el entorno social.

Refirió que conforme va avanzado la vida de nuestro país y se van presentando las diferentes constituciones, se puede observar que los conceptos de igualdad y ciudadanía, se van ampliando poco a poco.

Señaló que en los años 60’s, de acuerdo a un estudio sobre cultura política, de los autores Almond y Verba, señalan que los mexicanos tenemos una cultura política muy pobre, muy básica, es decir, que gozamos de una cultura política parroquial, que si bien se analiza, sigue presente hasta la fecha, de acuerdo a lo que los autores encontraron en ese momento en nuestro país.

Claudia Ramón señaló que aun con todos los antecedentes históricos que hay con respecto al sentido de igualdad y de participación ciudadana, “nos hemos convertido en un país más patriotero que patriótico, porque el concepto de Patria implica también esa pertenencia, esa apropiación del espacio, pero también de los derechos y obligaciones que nos conllevan, de participar e involucrarse en la vida política de nuestra patria”.

Indicó que falta profundizar en estos elementos de pertenencia y de identidad nacional con base a un territorio, para responder a la noción de ciudadano, en la que participa no sólo en las elecciones a cargos públicos, sino también en las decisiones cotidianas que nos impactan como sociedad en todo el país.

Lamentó que el mes de la Patria se esté convirtiendo en un “mes patriotero”. Por lo tanto, nos debe llevar a la reflexión de ver qué estamos haciendo como ciudadanos para participar y contribuir en elevar el debate público, y con ello, obligar a las élites políticas a mejorar la calidad del ejercicio de la política.

Claudia Ramón subrayó que la Facultad de Ciencias Políticas de la UPAEP está cumpliendo 48 años de fundación este 7 de septiembre, además invitó a los jóvenes a involucrarse en la vida política de su país, porque es importante la participación de los ciudadanos para contribuir a la construcción del bien público y en ese sentido, se requiere de la formación, tanto de ciudadanos como de élites de políticos, pero la formación de los politólogos es fundamental en estos momentos que vive nuestro país, para involucrarse y exigir que las cosas marchen bien desde el ámbito de la política.

Enfatizó que para los fundadores de la UPAEP, era importante formar analistas de los fenómenos políticos y de aquellos que quisieran ejercer la política con una visión que aspirara a democratizar los procesos y a la sociedad, de ahí, el nacimiento de la carrera de Ciencias Políticas de la institución, que en los tiempos modernos, sigue vigente su modelo educativo de formar politólogos capaces de dar respuesta los retos locales y globales del mundo moderno.