Tras un recorrido lleno de retos, Paola Díaz encontró su camino en Europa, donde ha trabajado por tres años en una casa de cuidados geriátricos, demostrando la solidez de su formación académica a nivel internacional.
A Paola Margarita Díaz Hernández, egresada de la licenciatura en Enfermería de la generación 2012-1018 por UPAEP, la vida le ha ido mostrando el camino para que poco a poco haga realidad sus sueños. Así llegó a Europa, donde trabaja desde hace 3 años como enfermera geriátrica.
Inició sus estudios de Medicina en una institución pública, pero un año después se dio cuenta que si bien el área de la salud era lo suyo, con sus habilidades y personalidad podría impactar más en el campo de la Enfermería, así llegó a UPAEP, una institución que gozaba de prestigio en el área y aunque su idea era únicamente estudiar y terminar su carrera, el ambiente universitario la atrapó.
“Mi idea no era involucrarme tanto, yo pensaba ir a la Universidad para tomar mis materias y se acabó, pero las dinámicas que hace UPAEP son muy atractivas. Te motivan a querer involucrarte en las distintas actividades, porque hay muchas actividades sociales, por ejemplo yo fui voluntaria en el Museo UPAEP ayudando en los cursos que se realizaban para niños ciegos, formé parte de la Mesa Directiva e iniciamos una campaña de donación de cabello y tapitas, recaudamos fondos para el albergue del Hospital del Niño Poblano”, relató Paola Díaz.
Todas estas actividades, dijo, le ayudaron a desarrollar habilidades que considera no tenía, principalmente a aprender a trabajar en equipos interdisciplinarios, lo que le dio la confianza de enviar solicitudes de trabajo en Hospitales y Clínicas de Puebla para poner en práctica todos sus conocimientos.
“Estaba a punto de salir de la Universidad, pero no tenía aún título, y tuve el atrevimiento de hacer entrevistas en hospitales privados donde me aceptaron y comencé a laborar. Mi idea era ganar experiencia y después ver la posibilidad de irme a Canadá o Estados Unidos, pero a finales de 2018 llegó la oportunidad de postularme para una convocatoria de reclutamiento de personal de enfermería que lanzó la Secretaría del Trabajo, con UPAEP como sede”, detalló Paola Díaz.
Como parte de esta postulación, Paola fue una de las 40 personas elegidas entre más de 140 enfermeros y enfermeras de todo el país que atendieron la convocatoria.
“Yo estaba segura que me quedaría. El día de la sesión informativa personal de la Cruz Roja de Baviera nos explicó todo lo correspondiente al proceso de postulación al programa: horario, salario, calidad de vida, gastos aproximados, región para la que estaban reclutando, idioma, en fin… Nos hicieron entrevistas y mientras esperaba, me puse a platicar con las demás chicas, había perfiles bastante interesantes, y recuerdo que una chica que estudió en la UNAM y que era jefa de enfermeras en el Hospital de la Raza me preguntó si creía que me elegirían. Sin dudarlo contesté que sí, no por arrogancia ni nada, pero yo estaba segura de estar preparada, quizá no tenía una amplia experiencia laboral pero sí tenía los conocimientos. Y bueno sí fui aceptada”, relató.
Aunque todo pintaba bastante bien y la Cruz Roja de Baviera le ofrecía un programa de idiomas antes de incorporarse como enfermera en Alemania, pues el requisito era obtener la certificación B1, cosa que consiguió en tiempo récord, la pandemia se atravesó, para finales de 2020 se embarazó y con ello se complicó la oportunidad de irse a Alemania.
“Me dijeron que me esperarían el tiempo que yo quisiera, que tenía las puertas abiertas, pero que no podía irme embarazada. La verdad si se me hizo injusto, así que con mi pareja, quien también era parte del programa y había sido aceptado, aplicamos el plan B. Él aceptó su trabajo, yo me vine con él como turista, tuve aquí a nuestra hija y después pedí una extensión de mi estancia. Fue un poco complicado porque tuve que regresar a México y volver, tuvimos que solventar todos mis gastos, pero no queríamos quedarnos en México ni tampoco vivir separados”, agregó.
Finalmente, el esposo de Paola platicó esta situación con sus jefes de una Clínica en Munich, quienes le dijeron que sin problema podrían emplearla.
“Oficialmente comencé a trabajar en diciembre de 2021 ya con visado. Pude traer a mi hija sin ningún problema y entre toda la situación reglamentaria, tuvieron muchas consideraciones conmigo. Me permitieron trabajar medio tiempo hasta que mi hija entró a la guardería, como 6 meses aproximadamente, pese a contar con un contrato de tiempo completo”, agregó.
Hoy Paola trabaja como enfermera geriátrica en una casa de adultos mayores, y aunque es distinto a cómo se trabaja en México, pues allá es únicamente considerada como cuidadora, se siente bastante satisfecha con haber logrado llegar al país europeo.
“Académicamente, la verdad es que el nivel de UPAEP es bastante elevado. He conocido en este trayecto profesional a compañeros de otras Universidades y no llevan la misma carga de materias, en este sentido, estamos bastante completos, tanto de manera práctica como teórica”, destacó.
En este sentido, invitó a quienes estén interesados en estudiar Enfermería en UPAEP, a sentirse con la confianza de que aquí van a aprender todo lo necesario para desarrollarse profesionalmente no solo en México sino también en el extranjero.
