De UPAEP a África: una Misión que transforma vidas
28/05/2025
Autor: Yolanda Jaimes

Estudiantes comparten su fe y talentos con la comunidad Massai. Una experiencia que los reta, los forma y los impulsa a ser líderes con propósito.

Ana Von Raesfel Nájera, Ana Teresa Conde Dueñas y Pablo Alan Baca Ramírez, estudiantes de Psicología, Arquitectura y Filosofía, respectivamente, son tres de los ocho jóvenes que este año eligieron vivir una experiencia espiritual diferente.

Y es que la Misión en África tiene como finalidad el fortalecimiento de la Iglesia local en la comunidad de Mashuru, en Kenia, lugar en el que ya se encuentran y del que regresarán hasta finales de junio de este año.

Allí, los estudiantes de la UPAEP esperan no solo reencontrarse con Dios, sino también consolidar su compromiso con Él, sirviendo con sus talentos a los pobladores de esta región, donde habita la tribu Massai.

“La misión no es imponer conocimiento, sino vivir la fe con otros y compartir el liderazgo. Tener esta sed de asombrarse por Dios y compartir esa sed de aprender, de salir adelante, de ser líderes. Saber de lo que somos capaces y cómo podemos aportar desde nuestra educación, valores y forma de pensamiento a los jóvenes de Mashuru. Queremos hacer crecer la esperanza”, compartieron los jóvenes misioneros.

Agregaron sentirse honrados por haber sido elegidos por Dios para esta misión, así como agradecidos con la UPAEP por brindarles la oportunidad de vivirla.

“Yo todavía no sé por qué, de entre todos los que nos postulamos, Él me eligió, pero creo que no se equivoca. Justo por eso no quiero fallarle. Quiero poner todas las virtudes que me ha dado a lo largo de mi vida al servicio de esta misión. Quiero ser el mejor ejemplo y que, con mi presencia, Él pueda hablarles a los jóvenes y a las personas de la comunidad”, expresó Teresa Conde.

Por su parte, Ana Von Raesfel aseguró que la misión comienza desde la propia comunidad y no se trata solo de compartir la palabra de Dios. Invitó a quienes nunca han vivido esta experiencia a hacerlo al menos una vez, pues no solo se transforman otras realidades, sino también la propia.

“La forma más grande de misionar es siendo ejemplo. Es decir, que la gente quiera acercarse a Dios porque ve que a ti te hace bien. En otras palabras: si veo amor en ti, veo amistad, veo paz, entonces yo también quiero eso. Los invito a ser ejemplo y a dejarse guiar por Él”, indicó.

En este mismo sentido, Alan Baca añadió que como estudiantes de una universidad católica, es un privilegio formar parte de una comunidad que ama a Dios.

“Cuando la gente empieza a hablar de Dios Padre, Dios amigo, Dios que ama, que consuela, que transforma, también se empieza a hacer misión. Tener una comunidad que ama a Dios hace que no te sientas solo. Entre jóvenes, muchas veces te juzgan, nos llaman ‘mochos’, pero es muy padre poder ser tú y predicar tu fe. Sí, la misión empieza desde uno, pero es aún mejor cuando vas acompañado. En Pastoral, cuando ves a muchos chicos que aman a Dios igual que tú, te sientes bien recibido. Somos muy afortunados de construir esta comunidad aquí en la UPAEP”, concluyeron Ana, Teresa y Alan.