^{Jesús Benítez se graduó de Maestría tras completar Prepa, Licenciatura y posgrado en UPAEP.}

La historia de Jesús Isaac Benítez Sandoval está hecha de constancia, disciplina y un profundo amor por los colores que defendió durante casi una década. Este 2025, Jesús Isaac concluyó sus estudios de Maestría en UPAEP, convirtiéndose en uno de los pocos estudiantes-deportistas que ha completado el ciclo formativo completo dentro de la institución: Preparatoria, Licenciatura y Maestría, todo ello mientras representó a las Águilas en competencias nacionales de taekwondo.

Su llegada a la Prepa UPAEP en 2014 marcó el inicio de un camino que combinó esfuerzo académico y entrega deportiva. A lo largo de nueve años, hasta finalizar su elegibilidad en 2023, Benítez Sandoval se consolidó como uno de los pilares del equipo de taekwondo, acumulando medallas, aprendizajes y momentos que hoy forman parte de la memoria colectiva de la comunidad universitaria.

En su trayectoria deportiva, Jesús Isaac destacó en múltiples ediciones de los Campeonatos Nacionales CONADEIP, donde enfrentó a los mejores exponentes del país y llevó a lo más alto el espíritu competitivo de las Águilas:

2014 – Monterrey (Juvenil C): Medalla de bronce
2015 – Monterrey (Juvenil C): Medalla de oro
2016 – Guadalajara (Juvenil C): Medalla de bronce
2017 – Santa Fe (Primera Fuerza): Medalla de bronce
2018 – UDLAP, Puebla (Primera Fuerza): Medalla de oro
2019 – Estado de México (Primera Fuerza): Medalla de oro
2022 – Anáhuac Norte, CDMX (Primera Fuerza): Medalla de bronce

Cada presea representó no solo un logro deportivo, sino un paso firme en su formación humana: la resiliencia en la derrota, la humildad en la victoria y el compromiso permanente con sus compañeros y entrenadores.

Hoy, con su grado de Maestro en mano, Jesús Isaac se despide del tatami universitario, pero deja un legado que inspira a nuevas generaciones de atletas. Su ejemplo demuestra que la excelencia es posible cuando se unen la disciplina del deportista y la visión académica del estudiante.

Su historia es, sin duda, el retrato de lo que significa ser un Águila UPAEP: volar alto, mantenerse firme y nunca dejar de crecer.